El socialismo copa el centro

Félix Soria REDACCIÓN

INTERNACIONAL

Portugal corre el riesgo de perder uno de los pocos partidos europeos que son genuinamente centristas, el Partido Socialdemócrata que fundó Sa Carneiro

23 feb 2005 . Actualizado a las 06:00 h.

Como pocas veces ha ocurrido en Europa desde hace veinte años -excluidos los nuevos países democráticos del extinto bloque soviético-, las elecciones del pasado domingo en Portugal han evidenciado un fenómeno inquietante: los partidos socialistas están ocupando el espacio de centro... ¡E incluso el de centro-derecha! Al mismo tiempo, la revitalizada derecha autoritaria (la llamada derechona ) condiciona a los gobiernos conservadores y los hunde electoralmente. Los socialistas que tiran hacia la derecha ganan electores (caso del PS de José Sócrates) y el centro-derecha que pacta con la derechona se suicida, como le ha ocurrido al Partido Socialdemócrata (PSD) luso, un partido de centro como pocos hay -¿o había?- en Europa. Los centristas lusos eran fieles a los planteamientos de su fundador, Sa Carneiro, y a los de su último líder ideológico, Cavaco Silva. Pero esa línea y su correspondiente oferta electoral, caracterizada por su cerebral interclasismo y por su medido y equilibrado respeto a las clases dirigentes y a los ciudadanos del común, fue dinamitada por el ex maoísta Durão Barroso; cuyo sucesor, Santana Lopes -un técnico sin poso ni habilidades ideológicas-, cayó en brazos de la derechona que representa el CDS-PP de Paulo Portas. Barroso y luego el tándem Santana-Portas han logrado asustar a gran parte de las clases medias lusas -desde la media-baja hasta la media-media-, que han entregado su voto a un socialista de color rosa que sí ha sabido leer e interpretar lo que quiere la mayoría del electorado, que en Portugal exige cosas bien simples: poner coto al creciente desempleo, reorganizar las finanzas públicas, acabar con el nepotismo de la Administración barrosista, animar a los inversores nacionales y extranjeros, y dejar de gastar dinero en lujos ideológicos absurdos como el de movilizar dos buques de guerra para impedir que un barco de abortistas atraque en la rada de Lisboa. Portas fue el primero en dimitir como líder del CDS-PP y horas después otro tanto hizo Santana en el PSD, convocando sendos congresos extraordinarios. Los barones del PSD quieren pasar página y recobrar su espacio de centro y el CDS-PP, pese a conservar su electorado, sólo quiere cambiar de piel para seguir en lo mismo: arrastrar al PSD hacia la derecha porque la derechona sabe que por sí sola nunca tendrá mayoría. ¿Se dará cuenta el PSD?, ¿volverá a ser socialista el PS?