Las tropas de la coalición preparan el asalto para retomar el control de Nayaf

D. Beriain / Agencias REDACCIÓN | NAYAF

INTERNACIONAL

La brigada española se enfrenta a tiros con milicianos de Al Sadr en Diwaniya y mata a varios insurgentes No queda claro cuál será el papel de la Plus Ultra si EE.UU. ataca la ciudad para capturar a Moqtada

13 abr 2004 . Actualizado a las 07:00 h.

A las afueras de la ciudad santa de Nayaf, las tropas norteamericanas venidas desde otros puntos del país se atrincheran y preparan el asalto a una ciudad que ayer seguía en manos del Ejército del Mahdi. Están a la espera, por si fracasan las negociaciones abiertas con Moqtada Al Sadr para que desarme sus milicias. «Hemos enviado fuerzas a Nayaf para estar preparados para una operación ofensiva que elimine los elementos restantes de Moqtada Al Sadr allí», dijo el general Ricardo Sánchez, comandante de las fuerzas terrestres de la coalición en Irak. Nayaf, que se encuentra dentro de la zona de despliegue del contingente español, ha sido escenario en estos últimos días de peregrinaciones por el Arbein, una de las festividades chiíes más importantes. Las tropas de la coalición parecen haber querido respetarlas. «Hasta ahora la situación, con las peregrinaciones, ha estado bastante tranquila. Lo que no sabemos es lo que va a pasar a partir de ahora», confesaba a La Voz el teniente coronel Guillermo García Novelles, portavoz de la Brigada Plus Ultra. El líder de la revuelta chií, el clérigo radical Moqtada Al Sadr, se encuentra escondido en esta ciudad y el Ejército estadounidense ha asegurado que hay orden de capturarlo «vivo o muerto». Evitar una masacre Ante un inminente asalto de las tropas de la coalición, se desconoce cuál será el papel de la Plus Ultra. Hasta ahora, han preferido atrincherarse en la base. Primero, para no provocar un matanza; después, porque los mandos han querido mostrar así su descontento con Estados Unidos, que llevó a cabo la detención de Mustafá Yacubi (el detonante de los disturbios) sin dar ninguna información a los españoles de lo que iban a hacer. «Cuando luego los manifestantes vinieron a pedirnos cuentas, nosotros ni siquiera sabíamos de qué estaban hablando», comentó entonces uno los portavoces de la Plus Ultra. Ayer la policía iraquí aseguró que estaba retomando el control de varias comisarías y de que los milicianos de Al Sadr se estaban replegando, tras llegar a un acuerdo para que los agentes pudieran entrar en la ciudad. Los mismos militares españoles relativizaron estas informaciones: «Si la policía ha recuperado las comisarías es porque la gente de Al Sadr lo ha querido, nada más. Ellos se están replegando a Kufa, que es su bastión», comentó el teniente coronel Novelles, dando a entender que las calles seguían siendo patrimonio del Ejército del Mahdi. Continúan los ataques Mientras, continúa el hostigamiento a las bases españolas en Irak. El más importante se vivió la noche del lunes al martes en la depuradora de agua de Diwaniya, un enclave estratégico vigilado por patrullas de la Plus Ultra a diario. Un grupo de milicianos atacó a los soldados con fusiles y lanzagranadas RPG. «Afortunadamente los soldados reaccionaron enseguida y pudieron repeler el ataque. Luego llegaron elementos de refuerzo y pudieron controlar la situación. Hemos causado varias bajas entre los radicales», comentó el teniente coronel Novelles. Por su parte, la base Santo Domingo en Nayaf sufrió un ataque con seis granadas de mortero que no causaron daños. No tuvo tanta suerte un soldado norteamericano que resultó muerto en un ataque con explosivo contra un convoy militar que se dirigía a Nayaf.