Una encrucijada para Coudet

x. r. c. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

XOAN CARLOS GIL

El argentino, poco dado a rotar al equipo en las jornadas intersemanales, podría cambiar de idea dada la situación y las prestaciones de algunos jugadores

20 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Eduardo Coudet es un hombre poco dado a los cambios en el once, incluso en secuencias de partidos cada cuatro días como la que le ocupa ahora, pero dada la situación del Celta, las necesidades y que quedó más satisfecho con el equipo del segundo tiempo ante al Cádiz, las posibilidades se abren de cara a visitar al Levante en la noche de mañana (22 horas).

La temporada pasada, en los ciclos de tres partidos semanales, el Chacho apenas hizo rotaciones. Su tope está en tres en el mes de mayo pasado entre los partidos ante el Villarreal y el Getafe. Kevin Vázquez, Joseph Aidoo y Iago Aspas fueron las novedades en la segunda cita en detrimento de Hugo Mallo, Néstor Araujo y Augusto Solari.

De cara a mañana, no pueden descartarse movimientos en todas las líneas salvo en la portería y la delantera. En defensa, el foco sigue estando en los centrales. Jeison Murillo parece el más fijo de todos, aunque su estado físico todavía esté lejos del 100 %, pero con Araujo renqueante (fue al banquillo por primera vez el viernes) y José Fontán relevado en el descanso ante el Cádiz tras cometer un penalti evitable, no puede descartarse que Carlos Domínguez pueda jugar su segundo partido como titular. De hecho, el vigués entrenó ayer con el primer equipo y no jugó con el filial ante el Racing de Santander, aunque sus dos relevos lo hicieron a la perfección.

En la sala de máquinas, Renato Tapia está pagando todo el esfuerzo que lleva acumulado y Fran Beltrán le da dinamismo al equipo cada vez que entra en escena. Se vio el viernes, y aunque el peruano sea una pieza básica para Coudet, todo indica que no está atravesando su mejor etapa. En algún momento tendrá que descansar.

Por delante, en la línea de medias puntas, hasta dos podrían ser los movimientos. Solari, que se estrenó como titular, tuvo más voluntad que fútbol ante el Cádiz y Brais Méndez podría recuperar su lugar habitual en el once, mientras que en la izquierda, las prestaciones de Franco Cervi en su segundo partido como titular se quedaron cortas. Nolito fue más incisivo en el carril izquierdo en la segunda mitad. No puede descartarse que el sanluqueño regrese a la formación inicial. De cumplirse estas premisas, sería casi devolver al equipo a la línea de salida. La ecuación también podría afectar a Denis, que fue otro de los sacrificados en el descanso del último partido.

Lo que no parece es que el Chacho vaya a cambiar de idea ante un equipo tan dinámico como el Levante. El argentino está convencido que el 4-1-3-2 es el dibujo que mejor se adapta al conjunto y los números de la temporada pasada le dan la razón. Este curso, por el momento, nada se salva.

Al margen de los nombres propios, la necesaria reacción del Celta debe pasar por reducir de un modo drástico las licencias en la zona defensiva. Si ante el Athletic fue un fallo grosero de Aidoo, ante el Cádiz fue conceder dos faltas de la nada a un equipo que sabe aprovecharse de los errores ajenos. En cinco partidos, los vigueses llevan diez goles en contra (a dos de media por contienda).

El Levante tampoco conoce el triunfo, pero de los cinco partidos disputados, empató en cuatro y las sensaciones son muy diferentes a las de un Celta que no termina de encontrar el camino.