Hoteles, restaurantes, supermercados, oficinas... los negocios de Denis Suárez

GRADA DE RÍO

DSF

El jugador del Celta gestiona desde hace siete años una sociedad patrimonial con intereses en sectores diversos a la que ha sumado la nutrición deportiva

28 mar 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Que el fútbol de élite genera ingresos al alcance de muy pocos no es ningún secreto. Que muchos profesionales se encuentran, una vez que el balón deja de ofrecerles ingresos, con serias dificultades para mantener su patrimonio y su ritmo de vida, tampoco. Denis Suárez (Salceda de Caselas, 1994) lleva mucho tiempo concienciado de ello. «Siempre he tenido inquietudes más allá del deporte y me he preocupado por darle valor a lo que gano, por intentar invertir bien pensando en el futuro. Creo que la diversificación de mi patrimonio me da un riesgo menor». Gran parte del tiempo que le deja el Celta, Denis Suárez lo dedica a sus empresas.

En la Navidad del 2013 constituyó una sociedad patrimonial. Buscó asesoramiento para modular sus inversiones. Esa sociedad, que gestiona a día de hoy varios millones de euros, ha repartido sus miras en diferentes mercados: una parte se ha dirigido al sector turístico, en varios hoteles. Otra ha centrado sus tiros en locales de restauración. Una tercera ha buscado beneficios en grandes superficies del sector de la alimentación y la cuarta ha destinado capital al sector inmobiliario, esencialmente en oficinas.

Denis Suárez no es de los que lo delega todo en asesores. «Lo que intento es optimizar mis recursos con un nivel de riesgo prudente, localizando activos premium con buenos descuentos que me generen rentas continuadas y por buenos operadores». Quiere estar al tanto y participar de cada decisión que se toma con su patrimonio.

En otra de sus inquietudes personales, la nutrición deportiva, ha encontrado el último tren empresarial al que subirse. Denis cambió por completo su relación con la comida durante su etapa en el Villarreal. Allí conoció a Héctor Usó, nutricionista del club y uno de los referentes de la materia en Europa, que le hizo reflexionar y modificar por completo sus hábitos alimentarios.

Denis apostó por una dieta vegana, como hiciera en su día Carl Lewis o actualmente deportistas de la entidad de Novak Djokovic, Lewis Hamilton o Venus Williams. Dejó Villarreal rumbo al Arsenal y allí coincidió con Héctor Bellerín, otro convencido de la causa. Él mismo se encargaba de elaborar y cocinar sus propios menús siguiendo una serie de recetas. «Ser vegano no es ninguna broma. Necesitas llevar un control muy definido de todo lo que comes». Ahí estuvo para Denis el germen de su apuesta por Tabalú, una empresa pionera en la nutrición deportiva personalizada.

Tabalú, la última inversión

Tabalú dio sus primeros pasos hace apenas un año de la mano de Julio Llopis. Denis Suárez se ha unido como socio y embajador deportivo. «Ahora mismo no hay nada igual en España. La inteligencia artificial nos da un valor añadido brutal. Nos ayuda con los perfiles de los jugadores a reducir lesiones», sostiene. Parte del éxito reside en que, además de elaborar los menús individualizados, la empresa se encarga de toda la operativa logística para que el futbolista tenga la comida cuando la necesita, sea en su casa o en un vestuario. El Villarreal fue el primer club de élite que concedió a Tabalú la gestión de la nutrición de sus jugadores. Le siguió el Celta, que firmó un contrato para los próximos cinco años. Otros dos clubes de la máxima categoría del fútbol español, además de varios deportistas a título individual, han requerido también sus servicios.

Denis Suárez sigue tomando nota. «Me ha ayudado mucho elaborarme un presupuesto cada año, desglosado por partidas. La estructura de mi patrimonio la decido yo. Siempre he tenido interés por conocer el por qué de cada inversión que hago y hacerle un seguimiento luego. Tengo reuniones periódicas para analizarlas. He tenido suerte con la gente de la que me he rodeado y para mí es un continuo aprendizaje». Su próxima apuesta ya le ronda la cabeza.

La ambiciosa escuela que extrañó cuando era niño

En el verano del 2011, siendo todavía juvenil, Denis Suárez dejó el Celta. Se fue a Mánchester para jugar en el City. Hasta su regreso, ocho años después, ha vivido también en Barcelona, Sevilla, Villarreal y Londres. Pese a los kilómetros por medio, nunca dejó de regresar a Salceda de Caselas. Allí se crio, allí sigue residiendo su familia, allí estudió en el IES Pedras Rubias y allí se enfrascó en un proyecto personal que bebe de sus inquietudes y de su propia experiencia cuando era un niño.

«Empecé a jugar al fútbol cuando tenía tres o cuatro años. Mi madre tiene una peluquería y yo me ponía a chutar el balón justo delante de la puerta. Le destrozaba todas las plantas. Un día, un cliente que venía a cortarse el pelo, le dijo: ‘¿Por qué no metes a Denis en un equipo?' A mi madre le pareció una buena idea, al menos así dejaría de romperle las plantas. Pero en Salceda no había escuelas de fútbol para niños tan pequeños».

Hace tres años, Denis decidió dar el paso y poner en marcha una ambiciosa escuela en Salceda. «Es un proyecto personal, que a mí no me reporta ningún beneficio económico. No está pensado para eso». No solo no le genera beneficios, aunque Denis lo omita lleva invertido en su campus más de medio millón de euros. «Mi ilusión era que mi pueblo tuviera unas instalaciones, unos materiales y unos entrenadores increíbles». Más de 200 niños, una gran mayoría de la comarca, forman parte de una escuela en la que están implicados casi 40 profesionales.

Una labor más allá del fútbol

El proyecto de la escuela no va a quedarse ahí. Denis sigue dándole vueltas al modo de crecer. «Queremos aumentar las instalaciones para que tenga capacidad para entre 350 y 400 niños. No solo es una escuela de fútbol al uso, ayuda también a familias con problemas económicos o de inclusión social. Tenemos una educadora que se encarga de los entrenamientos un día a la semana. Para mí es mucho más que fútbol».

Osscar Vázquez

En verano está previsto que se inicien las obras de un nuevo campo de fútbol 8, hay otro de fútbol 11 apalabrado, y la renovación de las instalaciones permitirá dotarlas de pistas de pádel, gimnasio y piscina.

La escuela de Denis Suárez ha donado durante la pandemia, tanto al pueblo de Salceda como al Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo, más de 50.000 euros.