Un partidillo pone fin a una dura segunda semana con 10 sesiones

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Los célticos descansan hoy y mañana vuelven al trabajo en A Madroa

23 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La plantilla del Celta se enfundó ayer por primera vez las nuevas indumentarias para la próxima temporada. Lo hizo para disputar un partidillo en A Madroa como colofón a la dura segunda semana de entrenamientos con diez sesiones y cuatro días de programa doble. De hecho Óscar García decidió dar descanso el sábado por la tarde, que en principio también estaba señalado como hábil. Los célticos tendrán asueto en la jornada dominical y mañana volverán a A Madroa para encarar la tercera semana de trabajo. La previsión del entrenador es que el equipo esté preparado para el 12 de septiembre por si finalmente se cumple la mejor previsión en cuanto al inicio de liga.

Mezclados

En el conjunto vestido de celeste formaron jugadores como Iago Aspas, Aidoo, Kevin, Carreira, Nolito o Beltrán, mientras que con la segunda indumentaria saltaron al campo entre otros Vadillo, Okay, Pione Sisto, Emre Mor y el Toro Fernández, que sigue en Vigo a la espera de resolver su futuro. Aspas, Vadillo y el Toro dejaron su sello goleador.

El partido puso fin a una exigente semana con diez entrenamientos en la que Óscar García ha comenzado a trabajar su idea de juego, que pasa por un equipo rápido, agresivo y dinámico, todo lo contrario de las últimas temporadas. El cambio, según el entrenador, requiere una pretemporada de lo más dura para llegar a la liga con el sistema y la idea asimilada.

La próxima semana, en teoría, llegará el primer amistoso oficial, ya que en Asturias se anunció para el miércoles a las siete y media de la tarde un amistoso con el Oviedo en Balaídos, una cita que el Celta no ha confirmado de un modo oficial. De hecho los vigueses aún no dieron a conocer su calendario de pretemporada. La pandemia solo permite amistosos por proximidad geográfica.