dejan drazic
Sin dejar huella
Dejan Drazic encajaba a la perfección en el perfil de jugadores jóvenes y de futuro que tanto gustan en el Celta. Llegó en agosto del 2015 para el extremo derecho, pero pronto quedó patente que solo rascaría algún minuto si Orellana causaba baja. En su primera y única temporada completa con el equipo jugó seis partidos, cinco de ellos saliendo de la banqueta, y su cuenta se quedó en unos redondos 100 minutos en Primera División. Eso sí, en el vestuario dejó un buen recuerdo. Ahora es uno de los jugadores franquicia del filial en Segunda B en un movimiento tan extraño como fructífero.