Los goles de Guidetti y Aspas habrían sido suficientes de no ser por las dos ocasiones clarísimas que desperdició Bongonda
04 nov 2016 . Actualizado a las 09:50 h.El Ajax prolongó su racha como local en Europa a costa de un Celta que encajó una derrota de justicia en el Ámsterdam Arena. Los primeros minutos de cada una de las dos mitades fueron los mejores de los celestes junto con un final que dejó a los de Berizzo con la miel en los labios. A punto de protagonizar la cara opuesta a lo vivido en Las Palmas el domingo, cuando a los vigueses les remontaron un 0-3. En esta ocasión, los goles de Guidetti y Aspas hubieran sido suficientes de no ser por las dos ocasiones clarísimas que desperdició Bongonda.
El once
Una segunda unidad. Berizzo siguió fiel a su política de rotaciones y de reservar a los futbolistas clave para la competición doméstica. Con los sancionados Sergi y Hugo como titulares en defensa junto a Fontás y Planas, completaron el once Marcelo, Señé y Radoja en el centro del campo y Bongonda y Lemos en ataque con un Rossi que no era titular desde el duelo frente al Panathinaikós. Volvió a sentar a Guidetti. Pero los menos habituales dejaron ver sus carencias durante la mayor parte del partido. Enfrente, un Ajax con su equipo habitual que marcó diferencias.
Arranque
De más a menos. El Celta entró bien al partido, pero le duró un suspiro. Exactamente el tiempo que tardó Bongonda en desaprovechar un regalo del meta Onana, que se equivoca al entregarle el balón al belga pero que este envía fuera. Esa jugada que podía haber cambiado el partido fue un revulsivo para los holandeses al tiempo que el Celta se iba casi al momento del partido. Subía la intensidad de los locales, buscando cada vez más la portería celeste, presionando sin descanso y avisando con varios intentos atajados por Rubén. El último, un paradón que precedió a la jugada del gol de Dolberg. Venían avisando los de Bosz y encontraron el gol justo antes del descanso entre las imprecisiones de un Celta prácticamente inofensivo.
Claves
Dos mazazos en tres minutos y una reacción inmediata. El partido parecía haber acabado para el Celta con dos goles consecutivos que llegaron justo cuando el equipo había logrado recuperar el pulso. Con el 3-0 el partido parecía sentenciado, pero llegó la reacción celeste primero con el tanto de Guidetti y luego con el golazo de un Aspas que sigue de dulce y que invitó a la hinchada celeste a soñar. El 3-3 lo tuvo Bongonda en sus botas, pero el belga volvió a convertirse en protagonista por errar una nueva ocasión cantada.
Cambios
Aire para el equipo a través de los titulares. Wass fue el primer recambio por un Lemos que pasó completamente desapercibido. Con el danés el Celta recuperó en parte un centro del campo muy desaparecido. Luego salieron los autores de los goles, dejando la sensación de que con otro once la historia podría haber sido distinta.