Daniel Wass, el guía de las finales

Lorena García Calvo
lorena garcía calvo VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

M.MORALEJO

Tras ganar la Copa de Dinamarca con el Brondby y disputar la final de la Copa de Francia con el Evian, el danés sueña con superar la semifinal española

03 feb 2016 . Actualizado a las 12:58 h.

Alcanzar una final de Copa es un sueño que muy pocos llegan a paladear, sin embargo, Daniel Wass ya lo ha disfrutado en dos ocasiones. Logró el título en Dinamarca, su país natal, y se quedó con la miel en los labios en Francia defendiendo la camiseta del Evian. Ahora, con el Celta, aspira a superar la exigente eliminatoria de semifinales contra el Sevilla y plantarse por tercera vez en su carrera en una final copera que supondría, de paso, una nueva página en la historia celeste.

«No todos los jugadores llegan a disputar una final en su vida deportiva. Sin duda, es algo muy grande para los aficionados y los futbolistas», comenta el internacional con Dinamarca. Fue en su país, en la temporada 2007/2008, cuando Wass vivió por primera vez la adrenalina de una final copera. En su segunda campaña en el Brondby -donde unos meses más tarde coincidiría con Michael Krohn-Dehli- el equipo fue despejando el camino con cierta comodidad hasta plantarse en una final contra el Esbjerg que ganaron 3-2.

El Brondby, que ya tenía cinco Copas de Dinamarca en su poder, ampliaba su palmarés con Wass disputando los noventa minutos de la final. Una final que repetiría cinco años más tarde en tierras galas de la mano del Evian.

«Alcanzar una final de Copa para un club pequeño como el Evian era increíble. Yo ya había jugado y ganado la de Dinamarca con el Brondby, pero en Francia era distinto, era un club humilde», recuerda el jugador, que al echar la vista atrás es capaz de recitar el camino que su club de entonces recorrió hasta la final de París. «Primero nos tocó jugar contra equipos más pequeños, pero en cuartos de final nos enfrentamos al París Saint Germain».

Con Ancelotti al frente del PSG y con Ibrahimovic y Thiago Silva compartiendo vestuario con un David Beckham que daba la puntilla a su carrera deportiva, las opciones del humilde Evian de superar al coloso parisino parecían escasas. Sin embargo, el fútbol depara sorpresas de vez en cuando y tras los 90 minutos reglamentarios el partido concluyó 1-1. «Tuvimos que ir a la tanda de penaltis y ganamos», cuenta Wass.

Superado el equipo parisino, el camino quedó despejado. «En semifinales nos enfrentamos al Lorient -al que golearon 3-0- y alcanzamos la final contra el Burdeos. Perdimos esa final, pero a pesar de todo fue increíble y un partido tremendo», describe el centrocampista, que reconoce que perder una final en el minuto 89 «no es fácil de aceptar cuando luchas por la Copa, pero a pesar de ello fue muy emocionante».

Sin similitudes

Cuando a Wass se le pregunta si el camino que el humilde Evian recorrió hasta llegar a la final de la Copa tiene similitudes con el que está atravesando el Celta, niega cualquier parecido. «No veo similitudes entre los dos, el Celta es un club mucho más grande que el Evian. No somos un equipo pequeño, somos un buen equipo y lo estamos demostrando, podemos enfrentarnos a cualquier rival», argumenta el internacional, que con su experiencia tiene algunas de las claves para alcanzar la final.

«En estos partidos es importante el físico y también el aspecto mental. Son dos partidos en los que tienes que estar mentalizado, no debes dejarte llevar por el estrés, e incluso si pierdes el primer encuentro debes tener presente que tienes un segundo partido para darle la vuelta al marcador». Wass desgrana las claves para plantar cara al Sevilla y proclama las opciones del Celta. «Por supuesto que podemos superar la eliminatoria. En cuartos de final nos tocó el Atlético de Madrid y los superamos», y esa es la mejor prueba de que los de Berizzo, a su mejor nivel, pueden apear del camino a cualquier rival.

«Prefiero ser centrocampista arrancando desde el medio»

Para Daniel Wass, jugarse con el Sevilla de su amigo Michael Krohn-Dehli el billete para la final de Copa no es algo irrealizable. «No preferiría a otro rival, aunque estoy contento de no encontrarnos con el Barcelona», reconoce. Sabe que si el Celta quiere alcanzar la final soñada, deberá, sobre todo «ser más inteligentes que el Sevilla y jugar nuestra opciones». Y es que el jugador tiene claro que estar concentrados y atentos es fundamental para su equipo.

A nivel individual, queda por ver qué papel depara Eduardo Berizzo para el danés en la Copa. Ya ha jugado de centrocampista ofensivo, defensivo, lateral y ha hecho las veces de enganche. «Para mí lo importante es jugar y prometo dar lo mejor de mí. Prefiero ser centrocampista arrancando desde el medio, pero ya he jugado en varias posiciones y me da igual dónde hacerlo».