Los vigueses afrontan su tercer partido en seis días, pero lo hacen invictos
26 sep 2014 . Actualizado a las 04:00 h.El Celta culmina una semana al esprint con la oportunidad de asentarse entre los mejores de la Liga. Los vigueses afrontan su tercer partido en seis días, pero lo hacen invictos, después de empatar en el Calderón ante el vigente campeón de Liga y tras anotarse el derbi. Con la confianza por las nubes, pero con un importante cansancio físico que puede pasar factura.
La visita al táctico Elche puede significar el primer día de rotaciones para Eduardo Berizzo o incluso de cambio de dibujo para jugar con tres centrales. No obstante, nada apunta a revolución en las siempre mesuradas decisiones del argentino. A priori cuenta con todo su plantel y se llevó a Elche a 19 jugadores para esperar hasta el último momento la respuesta física de la mayor parte de los contendientes.
Todo indica que los movimientos de más calado llegarán en la sala de máquinas, con Augusto Fernández y el Tucu Hernández esperando su oportunidad. El internacional con la albiceleste demostró el martes que ya está listo y con unas ganas locas por jugar. El chileno fue titular en el Calderón, pero luego no tuvo ni un minuto ante el Deportivo. El tercer nombre propio llega en la delantera. Larrivey fue el rostro del clásico en competencia con Sergio, pero Charles tiene una jerarquía dentro del equipo y quizás ha llegado el momento de tirar de galones.
Lo del cambio táctico que dejó caer el Toto, ya parece más complicado. Radoja crece en cada partido y el serbio parece estar en disposición de afrontar el doble cometido de funcionar como tercer central en defensa y darle una salida de balón aseada al equipo en ataque.
La contienda se presenta como una gran oportunidad para los vigueses, que pueden acabar el ciclo semanal con siete puntos de nueve posibles. Todos los estamentos del club se esfuerzan en repetir que la salvación es el único objetivo, pero los celestes son el único equipo con vitola de humilde que pervive entre los grandes tras cinco jornadas.
Más exigido llega a la contienda el Elche, que en la misma secuencia semanal no ha sumado punto alguno (ante Éibar y Real Madrid). Escribá cuenta con todo su plantel a excepción del excéltico Aarón Ñíguez y todo indica que mantendrá la apuesta. Ya confirmó que Manu Herrera tendrá un voto de confianza en la portería. En vanguardia sopesa jugar con dos delanteros para intentar incomodar a los gallegos, que tienen en la imposibilidad de mantener su portería a cero uno de sus debes.
El Celta viajó preparado para un partido físico, con un rival que salga a morder en los primeros minutos y en donde la concentración defensiva y los espacios en ataque pueden decantar la balanza. Si los celestes ganan músculo atrás tendrán mucho andado para llevarse el primer triunfo de la temporada a domicilio.