El Celta viaja a Málaga lastrado por los resultados y por la losa de la penúltima posición
26 oct 2013 . Actualizado a las 15:11 h.Las urgencias apremian al Celta. Lo reconoce hasta Luis Enrique. Seis puntos de 27 posibles son un pírrico bagaje para un equipo que soñaba con un año tranquilo y la penúltima posición en la tabla se ha convertido en una pesada losa que el equipo debe soltar cuanto antes. Por eso Málaga, en plena sobremesa, se presenta como una oportunidad para detener la hemorragia y salir a flote.
Los vigueses recuperaron el camino el lunes, aunque el resultado les diese la espalda en un desafortunado lance final. Volvieron a pisar área y circularon el balón como debe hacer un equipo que aspira a ser protagonista. A priori ese es el sendero sobre el que profundizar a primera hora de la tarde. La diferencia con respecto al Levante, es que el Málaga también quiere proponer y la disputa del balón estará más rifada que nunca.
En ese punto debe aparecer la capacidad de generar fútbol del medio campo. Liberado Oubiña del corsé táctico-defensivo, los vigueses encontraron grietas en las líneas del rival y llegaron al área contraria. Si el capitán vuelve a tener capacidad de movimientos, podría ver refrendada su idea de fútbol por dos peloteros con criterio: Álex López y Augusto, o incluso Madinda. Porque el trivote parece la única zona en donde las variaciones serán sensibles. Krohn-Dehli entrenó con normalidad, pero se quedó fuera de la lista por pequeñas molestias, y Rafinha -nominado a los premios Golden Boy- está sancionado, lo que provoca un cambio de dos elementos. Incluso podrían jugar los tres si el argentino parte en el flanco derecho del ataque, lo que convertiría a Santi Mina en el damnificado.
Más allá de la propuesta, la necesidad del Celta es mejorar en las dos áreas. Los celestes solo han dejado de encajar en una ocasión y por la contra solo han sido capaces de marcar un gol en los últimos cinco partidos. Preocupante.
El rival, aún con aureola de grande derivada de los últimos años, acaba de iniciar una nueva travesía en el desierto. Ha perdido potencial y caché, aunque Schuster ha conseguido crear un equipo con descaro y con hambre, con muchas caras nuevas. No llegan, no obstante, los malagueños en el mejor momento. Únicamente aventajan en tres puntos a los gallegos y acumulan una secuencia de dos derrotas consecutivas, aunque en su descargo son el único que ya ha jugado con los dos grandes en este arranque de Liga.
El equipo andaluz tampoco puede contar con su plantel al completo y tendrá que apostar por el panameño Chen en el centro de la defensa por la baja por sanción de Sergio Sánchez. Formaría pareja con Weligton. En ataque el técnico alemán anunció que apostará por el dúo Santa Cruz-El Hamdaoui.
Da igual quien esté enfrente. El Celta ya no está para elegir. Su reacción no puede dilatarse por más tiempo.