Luis Enrique se carga al Celta

Xosé Ramón Castro
x. r. castro REDACCIÓN / LA VOZ

GRADA DE RÍO

Enrique de la Fuente

Descompuso al equipo con sus siete cambios y los vigueses deambularon ante un pésimo Getafe

27 sep 2013 . Actualizado a las 07:46 h.

Espantoso. Luis Enrique se cargó el partido con sus siete cambios y el peor Celta en mucho tiempo sucumbió ante un pésimo Getafe. No se salvó nadie, ninguno de los secundarios se reivindicó, pero el foco del partido debe recaer sobre el entrenador asturiano, que lejos de aprovechar una buena ocasión para asentarse entre la clase media, tiró a su equipo hacia el sótano a la espera de recibir al Elche. Como penitencia, los vigueses suscribieron su derrota a balón parado. En donde más le duele. Solo así podía ganar el cuadro azulón tan patético como los celestes (ayer con la gafada camiseta granate).

La realidad superó al disparate. Luis Enrique cambió a siete jugadores con respecto al domingo y de los cuatro que repitieron, dos lo hicieron en otra ubicación. Por encima, hizo debutar a Bellvís como lateral derecho a pierna cambiada. El asturiano no cambió el sistema, pero montó semejante quilombo que el Celta fue un perfecto desconocido ante un Getafe igual de errático pero que acertó en un lance de estrategia un minuto antes del descanso para encauzar un pésimo partido hacia su lado.

Ni una a derechas

El Celta no dio una a derecha. Coleccionó pérdidas de balón, desajustes defensivos y vivió como alma en pena por detrás del balón. Tan solo se estiró en dos ocasiones. En una contra de David y en una cabalgada de Rafinha. Lo mejor que le pasó al equipo vigués en ese primer acto fue que se encontró a un equipo igual de obtuso enfrente. Los de Luis García no dieron un pase a derechas, abusaron del desplazamiento largo, presionaron incluso menos que su oponente y fueron incapaces de sacar ventaja de toda la concesión de espacios de la zaga celeste. Solo Sarabia desde la frontal tuvo el criterio de darse la media vuelta para forzar el córner que permitió a Lisandro marcar emergiendo entre Cabral y Jonny. Ninguno de los dos le intimidó lo suficiente. Para completar el desastre, el infortunio se cebó con Bellvís, lesionado a los 16 minutos en su primer partido del curso.

El desastroso partido escribió su último renglón a la vuelta del vestuario. En un nuevo córner. En plena antología del disparate, Arroyo no necesitó rematar en el segundo palo. El balón le tocó en un muslo y se introdujo en la portería de un vendido Yoel.

Para completar el ataque de entrenador la solución que buscó Lucho fue darle minutos a Santi Mina en detrimento de Rafinha dejando de lado a Charles y Álex López. Nadie lo arregló, salvo en un par de arreones fue el Getafe, apático pero animado por su ventaja, quien tuvo las oportunidades para ampliar el marcador. La más clara, en los pies de Sarabia, pero Yoel le privó de marcar el tercero.

El resultado deja tocado al Celta, pero se convierte en una cuestión menor. El conjunto vigués retrocedió en el Coliseum un buen puñado de años y ahora el toca levantarse. Lo único bueno del disparate de Luis Enrique es que el núcleo principal del equipo estará descansado para la batalla del domingo ante el Elche. En donde los puntos comenzarán a tener un valor esencial para la salvación.

Ficha técnica

Goles: 1-0, min 43. Lisandro de cabeza. 2-0, min 49: Arroyo.

Árbitro: González González (Comité Castellano-Leonés). Mostró cartulina amarilla a Aurtenexe (min 69) por parte del Celta y a Mosquera (min. 59) y Arroyo (min. 79) por parte del Getafe.

Incidencias: Coliseum Alfonso Pérez, 6.000 espectadores.

Arroyo, Lisandro (Rafa, min. 79), Alexis, Roberto Lago; Mosquera, Borja; Pedro León, Sarabia, Diego Castro (Gavilán, min. 76); y Miku (Colunga, min. 71).

Yoel; Bellvis (Jonny, min. 18), David Costas, Cabral, Aurtenetxe; Oubiña, Madinda; Orellana, Rafinha (Santi Mina, min.59) Krohn-Dehli (Alex López, min. 75); y David Rodríguez.