La prensa británica asegura que la revelación del diagnóstico de la princesa no estuvo relacionada con las vacaciones escolares de sus hijos
02 abr 2024 . Actualizado a las 21:25 h.Después de dos meses de especulaciones y teorías conspiratorias sobre su estado de salud, Kate Middleton salió el pasado 22 de marzo a contar en un vídeo una realidad que había estado intentando mantener en secreto. A raíz de su operación abdominal le había sido diagnosticado un cáncer y estaba sometiéndose a un tratamiento de quimioterapia preventiva para superar esta grave enfermedad. Los príncipes de Gales habían aguantado varias semanas de intensos rumores, disparatados buena parte de ellos, sin salir a contar la verdad de la situación familiar.
Ahora se ha sabido por qué aquel viernes previo a la Semana Santa sí decidieron lanzar un emotivo vídeo protagonizado por Kate Middleton en solitario en el que revelaba con entereza su dolencia y pedía respeto para sobrellevar este duro trance con tranquilidad y en la más estricta privacidad.
En un primer momento se aseguró que los príncipes de Gales habían decidido comunicar la noticia para acabar con los rumores y especulaciones surgidos en las semanas anteriores. Se encontró una explicación que aseguraba que habían esperado hasta el día del inicio de las vacaciones escolares de Pascua -que en Reino Unido se alargan durante más de tres semanas- para proteger a sus tres hijos, George, Charlotte y Louis, de los comentarios en el colegio sobre la enfermedad de su madre.
También se pensó que el anuncio se llevó a cabo para aplacar las especulaciones que se habrían desatado cuando el príncipe Guillermo y su familia no aparecieran, este pasado domingo, en la misa de Pascua del castillo de Windsor y a la que sí asistió el rey Carlos III, también convaleciente por un cáncer.
Sin embargo, la prensa británica, en concreto el Daily Mail, ha revelado que la verdadera razón por la que la casa real decidió que la princesa saliese a dar la cara y a compartir públicamente que padece cáncer fue la de evitar que el anuncio se filtrara a través de otra fuente.
Horas antes de la emisión de su vídeo, trascendió que había habido una filtración del historial médico de la nuera de Carlos III en el Hospital en el que fue operada del abdomen el pasado enero, el Hospital London Clinic. El tabloide británico sostiene que alguien que conocía la verdad sobre el diagnóstico de cáncer había contactado con el palacio de Kensington, lo que precipitó la publicación del vídeo.
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El miedo a que se filtrase la noticia por cualquier otro medio que no fueran ellos mismos -no se sabe si por algún trabajador de la Clínica o por alguna persona cercana a la familia real británica conocedora de la noticia- hizo que el anuncio de la princesa de Gales se precipitase.