Gonzalo Caballero declara el proyecto del PP «esgotado» e invoca un cambio progresista

Domingos Sampedro
Domingos Sampedro SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Xoán A. Soler

El líder del PSdeG critica el deterioro de la sanidad y el declive industrial, y reta a Feijoo a hacer más caso a Puy que a Rueda o Tellado

25 sep 2019 . Actualizado a las 21:50 h.

Habló de la Galicia «que vai a menos» para definir el legado que deja el PP y se refirió a Feijoo como un líder «illado». El secretario general de los socialistas gallegos, Gonzalo Caballero, se estrenó este miércoles en el formato del debate sobre el estado de la autonomía haciendo un balance «fondamente negativo» del Gobierno gallego e invocando un cambio que permita construir una Galicia «progresista, dinámica e con futuro» una vez que se convoquen las próximas elecciones autonómicas.

Aunque el ajuste de los tiempos de intervención privó a Caballero de pronunciar la última parte del discurso que tenía preparado, sí pudo construir un exhaustivo relato sobre el balance que deja la década de Gobierno de Feijoo. «Galicia foi a peor, déixanos unha Galicia máis cativa», relató, enumerando que la deuda pública se ha triplicado, al pasar de los 3.565 a los 11.587 millones de euros, e incidiendo en que hay menos gallegos trabajando, que subió el paro de larga duración, que existe «fondos problemas de desigualdade, pobreza e risco de exclusión» o que mermó el peso industrial, pues adujo que en la última década entraron en crisis o desaparecieron firmas como Caramelo, Alfageme, Pórtico, Pescanova, Banco Pastor, Banco Popular, así como las cajas de ahorro y «milleiros» de pymes.

También se detuvo de manera especial en los «fracasos» de la política social. «Tivo que aparecer a Fundación Amancio Ortega para paliar o seu incumprimento na construción de sete residencias para maiores», enfatizó el dirigente socialista, que también agradeció dicha donación y exigió a Feijoo una rectificación de las insinuaciones hechas acerca de que el PSOE había criticado esta labor.

Acto seguido, Caballero aprovechó para hurgar en las cuestiones internas del PP y generar discordia. «Fágalle menos caso ao señor Tellado e ao señor Rueda», recomendó a Feijoo sobre quienes ocuparon la secretaría general del PPdeG, «e escoite máis ao señor Puy», dijo, cosechando un sonoro aplauso en su bancada.

Claro que Pedro Puy, el portavoz de los populares, no tardó en replicar y recomendó a Caballero que, en lo que atiene a la financiación, le haga también más caso a su portavoz, Fernández Leiceaga, que a las cábalas del Gobierno de Pedro Sánchez.

Caballero hizo otro alto en el camino de su discurso para hablar sobre la sanidad y acusar a Feijoo de colocarla en la UVI con la precarización y los recortes. No faltó la defensa cerrada de la labor realizada por el Gobierno central, y acusó a la Xunta de crear un relato del «suposto agravio» con el bloqueo de las entregas a cuenta, cuando dio este asunto por resuelto.

Finalmente, frente a la Galicia de la próxima década esbozada por Feijoo, el líder del PSdeG llamó a enterrar la «estabilidade da decadencia» para construir la Galicia progresista que anhela.