José María Arias Mosquera: «Nuestro primer objetivo es mejorar el rendimiento académico entre el 20 y 40 %»

S. C. REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

MARCOS MÍGUEZ

El presidente de la Fundación Barrié sigue de cerca el desarrollo de Piteas, en el que hay seis años de investigaciones y trabajos. Ahora se enfrenta a su puesta en práctica con la seguridad de que han acertado, pero también dispuesto a cambiar lo que haga falta, porque lo primero para José María Arias es ofrecer el mejor futuro educativo a Galicia

08 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El programa Piteas no se entiende sin José María Arias Mosquera, presidente de la Fundación Barrié. Él sigue de cerca todos los avances del proyecto desde su germen, el exitoso Talento 3.0, y supervisa todo el proceso, con reuniones personales cada trimestre con los profesores que participan en el programa.

-Aunque Piteas parte como programa de formación de profesorado, ¿se puede considerar un modelo educativo en sí?

-Es un modelo educativo. Está orientado al profesorado porque es la base, pero incide directamente en un cambio en el centro y por supuesto en el alumno. Es una nueva manera de aprender, de enseñar, de motivar, de que el alumno impulse sus capacidades creativas y al mismo tiempo mejore sus niveles cognitivos.

-¿Nace con vocación de ser el futuro modelo educativo de Galicia?

-Nosotros tenemos una ambición muy clara: si este programa, después de hacer sus análisis y evaluaciones, demuestra que da resultado, su objetivo fundamental es ser replicado por diferentes centros.

-¿Hay alguna mejora medible que se incluya en Piteas?

-Todos los proyectos de la Fundación Barrié tienen sistemas de indicadores y son objeto de evaluación permanente. Es la única manera de saber si vas en la buena dirección y cumples o no cumples objetivos. Sobre Piteas, tenemos cuatro. El primero es una mejora del rendimiento escolar entre el 20 y 40 %, y lo analizaremos a través de una comparativa con centros similares, totalmente anónima, que reflejará si se ha producido esa mejora; en segundo lugar, pretendemos aumentar la capacidad cognitiva de los alumnos; y finalmente, mejora en su capacidad creativa y motivacional.

-¿Por qué precisamente este modelo? Porque llevan años estudiando varias cosas. Piteas no es fruto de la casualidad...

-Ningún proyecto de la Fundación lo es. Piteas surge después de seis años de diferentes programas educativos con cierto grado de innovación desarrollados por la Fundación. Programas que han supuesto una inversión de cuatro millones de euros y que lo hemos centrado en 750 centros educativos, 200.000 alumnos y cerca de 20.000 profesores. Todos tenían tres o cuatro características que engloba Piteas: el desarrollo del talento, el impulso de la creatividad, una educación en valores y el fomento de vocaciones científico-tecnológicas. Todo lo anterior lo hicimos de la mano del profesorado, porque ninguna mejora se puede implantar si el profesor no le ve posibilidades. Es quien conoce al alumno y cómo enseñar. Y en el caso de Piteas nos han puesto de manifiesto que les interesa, y les interesa mucho.

-Siguen la metodología SEM, pero adaptada a Galicia 

-Una vez que hemos validado y testado estos proyectos los englobamos en Piteas. Es como una red de proyectos de innovación educativa que tiene como objetivo el desarrollo del talento con una acción colaborativa y trabajo en grupo, y sigue la metodología SEM, que es una metodología contrastada en EE.??UU. pero adaptada a la realidad de Galicia, con integración curricular. No nos vale un planteamiento teórico aunque haya funcionado en otros países si no somos capaces de adaptarlo a nuestra idiosincrasia, cultura, sistema educativo y percepción de a quién va dirigido. Nuestra realidad educativa, en definitiva. Sin eso no funciona. Las estrategias mejor diseñadas fracasan en su implantación. Y lo que queremos es un modelo que funciona fuera de nuestras fronteras, cómo adaptarlo a nuestra realidad educativa. No es un proyecto enlatado, cerrado. Una de las características que permite Piteas es que respeta la identidad del centro, respeta su cultura y le otorga flexibilidad.

-Cuentan con el absoluto apoyo de la Consellería. ¿Es una necesidad fundamental contar con la Administración para que sea un éxito?

-Absolutamente. Quien tiene el liderazgo, que le corresponde, por ley y medios, es la Consellería de Educación. No es un proyecto para las élites, sino para que se pueda expandir a nivel general. Si nosotros queremos que el modelo se replique en otros centros, la Xunta tiene que estar desde el primer momento.

-¿Qué respondería a los que critican estos modelos educativos en los que la memorización pasa a un segundo plano?

-En el fondo, la civilización ha sido la transmisión del conocimiento de unas a otras personas. La manera de acceder a ese conocimiento o estaba en el cerebro o en bibliotecas; en cualquier caso, era difícil y compleja. Ahora tenemos el conocimiento en un just in time. Uno hoy se pregunta si es más importante saber la lista de los reyes godos o saber cómo esos reyes godos lograron cambiar la sociedad, la cultura, la legislación... La lista la puedes mirar en un teléfono móvil en dos segundos.

-¿Cómo será un chico, una chica, educado con Piteas?

-Si conseguimos potenciar sus ansias de conocimiento y una aplicación práctica del mismo, le ofreceremos un esquema mental que le servirá en todos los órdenes de la vida. Crearemos líderes en todos los ámbitos, personas polivalentes que sepan adaptarse a las necesidades.

-En Galicia hay cada vez menos niños. ¿Es una locura no formarlos bien?

-En ese sentido, no importa que haya pocos o muchos. No podemos permitirnos el lujo de no formarlos porque si no, otros ocuparán su lugar.

-Como conocedor del mundo empresarial. ¿Qué cree que busca un empresario en sus empleados, en sus colaboradores?

-Todo es un mix. Una de las cosas que más persigo es que tenga ambición y ganas, porque sin eso no se crece. Segundo, que sea muy polivalente, que no se encastille en trabajos extraordinariamente específicos, que tenga visión global. También que sepa relacionarse, trabajar en equipo aprovechando las ideas y construyendo a partir de ellas, y luego, evidentemente, que tenga una base teórica sólida.