El pesquero fue rescatado del mar en la tarde del miércoles, estaba hundido a una profundidad de 22 metros
21 sep 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Los tripulantes del Serviola, el pesquero que el martes se hundió en la ría de Muros-Noia, y en el que murió el sonense Manuel Carou, prestaron ayer declaración en el cuartel de la Guardia Civil muradano sobre las causas del fatal impacto contra una batea. El testimonio de los marineros -dos senegaleses y un marroquí-, coincidió con el prestado por el patrón del pesquero, Jesús Queiruga, la misma mañana del siniestro.
Por otra parte, el Serviola fue rescatado del mar en la tarde del miércoles. Estaba hundido a una profundidad de 22 metros. Además, las pesquisas que se siguen sobre el siniestro dieron ayer con la batea del polígono Muros B contra la que impactó el pesquero.
La embarcación llegó a tierra remolcada por un buque de salvamento de una empresa privada. Presenta una rotura del casco de madera, a la altura de la amura de estribor, donde se aprecian al menos tres listones dañados.
Carpinteros de ribera de O Freixo (Outes) tapiaron el boquete, para permitir la navegabilidad del navío. También se achicó todo el agua que contenía el barco, varado en una rampa marítima del puerto de Muros. Al subir al marea, el buque fue remolcado hacia el puerto de O Freixo para su reparación.
Por otra parte, la Consellería do Mar declinó ayer entrar en la polémica sobre si se debe o no obligar a señalizar lumínicamente las bateas. Aunque «efectivamente a sinalización parece ser unha necesidade, este non é momento de entrar no debate».