En los últimos años se observa un aumento de alumnos que acuden a FP. Eta situación se debe a varios factores:
1. Es la enseñanza que, a pesar de la crisis, ofrece las mejores expectativas para la incorporación laboral. Además, programas como edu-emprende proporcionan a aquellos alumnos o exalumnos que optan por crear su propia empresa una ayuda importante.
2. Un aumento del prestigio social de estas enseñanzas que hace que muchos alumnos, algunos con magníficos expedientes académicos, opten por la FP como su primera opción para formarse profesionalmente.
3. El incremento de la oferta, en variedad y flexibilidad, hace que se pueda encontrar en la FP aquella que mejor se adapta a las necesidades.
Hablamos de los Programas de Cualificación Profesional Inicial, que ofrecen a alumnos de los últimos cursos de la ESO una formación que permite alternar los contenidos más academicistas con una formación inicial que les proporciona además un primer contacto con la empresa.
También de los ciclos medios y superiores en oferta ordinaria, que se nutren, fundamentalmente, de alumnos que han finalizado la ESO y el bachillerato, si bien a los ciclos superiores acuden cada vez más estudiantes procedentes de la universidad que, o bien han finalizado estudios universitarios o alternan ambos estudios, buscando en la FP esa cercanía a la empresa. Otro aspecto reseñable es la oferta cada vez mayor y más variada para la formación de adultos, con la formación modular, en sus modalidades presencial y a distancia. Esto permite la matrícula en módulos independientes, por lo que está indicada para trabajadores en activo y para desempleados.
No es ajena a este incremento de alumnado la crisis económica, que hace que ante una mayor dificultad para encontrar trabajo, muchos alumnos decidan continuar dentro del sistema educativo.