El ministerio empleará 170 millones de euros para evitar la congestión del principal acceso a la urbe viguesa
14 jul 2010 . Actualizado a las 21:24 h.El Ministerio de Fomento dio ayer un importante avance al proyecto para adosar un tercer carril en cada sentido al puente de Rande, el principal cuello de botella de la AP-9, y a otros seis kilómetros de la autopista desde el enlace con Cangas hasta el de Teis, ya en los aledaños de Vigo. Para ello, publicó ayer en el Boletín Oficial del Estado el anuncio de que somete a información pública el proyecto de trazado de la ampliación, cuyo coste alcanzará los 170 millones de euros.
El calendario que maneja el Gobierno central es aprobar de manera definitiva el proyecto una vez concluida la información pública, momento en el que llevará a cabo las expropiaciones. Según confirmó ayer el ministerio a La Voz, su objetivo es iniciar las obras el año próximo para que la ampliación pueda entrar en servicio en el 2014.
La longitud del tramo es de seis kilómetros, de los que kilómetro y medio corresponden al puente y a los dos viaductos de acceso por ambos extremos. Se trata de una zona de alta densidad de tráfico, con una intensidad media en torno a 65.000 vehículos por día, que en momentos puntuales del verano supera incluso los 70.000.
Un dato de gran relevancia para los usuarios de la autopista es que Fomento ha diseñado un sistema que permitirá seguir utilizando el puente mientras se ejecuta la ampliación. Para ello, los nuevos carriles se construirán en cada lateral del puente.
Oposición vecinal
El tercer carril que se añadirá tendrá 3,5 metros de ancho en cada sentido, puente incluido. Según el ministerio, la solución técnica diseñada pretende lograr la mínima afección al entorno, aprovechando para ello los espacios disponibles. De esta forma, donde la mediana permita ampliar las calzadas por el interior se aprovechará esta posibilidad; en caso contrario, será preciso ocupar espacio exterior y realizar expropiaciones.
Precisamente, la ocupación de terreno privado ha generado un movimiento de oposición en Chapela, la populosa parroquia redondelana lindante con Vigo atravesada por la AP-9.