Los asaltantes de Carrefour pudieron elegir el centro por su escasa vigilancia

Bea Abelairas
Bea Abelairas A CORUÑA

GALICIA

Dos guardias se ocupan del área comercial, mientras otro está atento a la sala de pantallas La zona por la que planearon la huida está controlada por unas cámaras fijas obsoletas

21 mar 2006 . Actualizado a las 06:00 h.

La banda que el pasado sábado asaltó a dos agentes de Prosegur que recogían la recaudación en el interior de Carrefour, en A Coruña, pudo haber elegido este centro por sus escasas medidas de seguridad. Las cámaras del hipermercado de la avenida de Alfonso Molina, instaladas en la zona por la que huyó la banda con un botín de 140.000 euros, son fijas y se encuentran bajo una cristalera que les resta aún más nitidez. Los responsables del centro comercial y los testigos del suceso comprobaron el domingo y el lunes, al revisar las cintas, que apenas se ve a los asaltantes en la grabación. A la hora de planear el golpe, los delincuentes también pudieron tener en cuenta que en la zona comercial sólo hay dos agentes de seguridad, mientras otro vigila las pantallas que recogen las imágenes del área comercial, donde sí hay cámaras móviles. El secretario de Agasep, asociación que agrupa a los trabajadores de empresas de seguridad, explicó ayer que el plan de seguridad que actualmente tiene Carrefour es muy limitado. «Tienen a dos agentes por turno para atender todo el hipermercado, y cuando trasladan la recaudación deben hacerlo por una zona abarrotada de gente, como sucedió el día del asalto. No pueden hacer nada, si hubiesen sacado un arma podrían haber herido a algún cliente», denunció José Manuel Boquete, quien también detalló que esta situación se repite en muchas áreas comerciales. Calle Barcelona «En las zonas peatonales pasa algo que también puede generar problemas: los empleados de la empresa que debe trasladar los fondos tienen que dejar el furgón blindado lejos y después caminar con sacas llenas de millones entre la gente. Sucede a diario en muchos sitios, por ejemplo, sin salir de A Coruña, en la calle Barcelona», recalcó el secretario de Agasep. Por su parte, portavoces de la firma Prosegur, encargada del traslado de fondos, y de Eulen, responsables de la seguridad en el híper asaltado, declinaron hacer comentarios sobre cómo se realizan las entregas y sobre el último robo. «Vamos a pedir una reunión con las autoridades para que se tomen medidas cruciales como que estas tareas se hagan a una hora en la que no haya clientes o por zonas expresamente habilitadas para ello. Hace falta un cambio de ley», apuntó José Manuel Boquete. Cambio de ruta Por ahora, los encargados de recoger el dinero en el Carrefour asaltado sólo han adoptado una medida de seguridad: «El lunes fueron por otro pasillo y los acompañaban los agentes de seguridad, pero todo el mundo se dio cuenta de a lo que iban», puntualizó ayer un dependiente del hipermercado.