Me llamo Bond, y soy rubio

Manuel Allende CORRESPONSAL EN LONDRES

GALICIA

STEPHEN HIRD

El británico Daniel Craig fue el actor elegido como sucesor de Pierce Brosnan para la continuación de las aventuras de 007, el espía con licencia para matar

14 oct 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

Los servicios de inteligencia de su Graciosa Majestad británica cuentan desde ayer con su sexto James Bond, el agente secreto con licencia para matar, seducir y entretener. Después de que Ian Fleming creara a 007 hace ya cuatro décadas, el nuevo Bond, el actor Daniel Craig, llega con una sustancial diferencia respecto a sus antecesores: es rubio. No podía ser de otra manera. La presentación mundial del nuevo Bond se realizó con toda la parafernalia típica de las Bond movies. El actor inglés de 37 años se presentó ante el nutrido barullo de periodistas en el Támesis, a bordo de una fueraborda de la Royal Marine. El nuevo 007 posó para los fotógrafos del brazo de la productora de las películas de Bond, Barbara Broccoli, y durante la rueda de prensa dijo que no supo hasta el pasado lunes que había sido elegido como nuevo Bond y que cuando se enteró lo primero que hizo fue pedir un trago. Craig puede ser un actor desconocido para la mayoría de los espectadores, aunque no pasó desapercibido para los críticos de cine tras su actuación en películas como Tomb Raider I, Layer Cake y Munich. En los últimos tiempos han sido más notorios su nombre e imagen por el supuesto romance con Sienna Miller y el anterior con la modelo Kate Moss. Pero los más puristas fanáticos de Bond opinan que Fleming estableció en sus libros que Bond era moreno. Y Craig es un rubiales de ojos azules que si bien puede arrasar en el sector femenino, entre los puristas no cuela. También es verdad que Fleming decía en sus libros que Bond presentaba una cicatriz en su mejilla izquierda y que uno recuerde ningún Bond la tenía. Además de ser el primer Bond rubio, también es el más bajo de todos, ya que sólo mide 180 centímetros. Para lograr el papel, Craig mantuvo un pulso con varios actores de prestigio, como Hugh Jackman, a quien se calificaba de «demasiado evidente», Colin Farrell (considerado «demasiado desaliñado»), Eric Bana («no suficientemente guapo») y Ewan McGregor («demasiado bajo»).