Si los capítulos de una hora son un agobio para ti, no desesperes. Te proponemos series de episodios cortos que merecen la pena para el final de una jornada larga
20 abr 2023 . Actualizado a las 09:04 h.Es de noche, acabas de cenar, quieres desconectar la cabeza un rato y ver una buena serie, pero, entre que eliges, se ponen todos de acuerdo frente a la pantalla y le das play al reproductor, ya se te han quitado las ganas de ver nada. Para que no te pase, te dejamos cinco series con capítulos de menos de 30 minutos y máximo tres temporadas, para que las disfrutes cuando tienes poco tiempo. Eso sí, no prometemos que el primer episodio no te enganche y termines viéndola por horas.
Desde comedias dramáticas, pasando por autoficciones, hasta historias de amor con capítulos autoconclusivos, aquí te dejamos una selección de series con episodios de treinta minutos o menos y de máximo tres temporadas. Hay para todos los gustos y en todas las plataformas.
Si estás buscando una comedia dramática con actores de Óscar, no dejes de ver El Método Kominsky (Netflix). La serie de tres temporadas relata la historia de Sandy Kominsky (interpretado por Michael Douglas), un actor de teatro y cine que ahora es un entrenador de actuación, y a su mejor amigo y agente, Norman Newlander (Alan Arkin). Además de las actuaciones alabadas por la crítica, la serie aborda temas como envejecer en Hollywood, la salud mental, la enfermedad y la soledad.
Si quieres menos drama y asegurarte de que el final del capítulo no te dejará en vilo, puedes darle una oportunidad a Modern Love (Amazon). Se trata de una serie de capítulos autoconclusivos e historias independientes inspirados en la columna homónima del The New York Times en la que se aborda el amor desde una perspectiva no romántica y en todos sus matices: padres a hijos, infidelidad, amistad, envejecimiento...
Si quieres un poco más de emoción, puedes probar con Run (HBO). Tiene solo una temporada de siete episodios. Se trata de una comedia dramática y de suspenso en la que Ruby (interpretada por Merritt Wever) y Billy (Domhnall Gleeson) vuelven a verse después de 17 años y se embarcan en un viaje en tren por Estados Unidos, dejando atrás sus vidas actuales. A medida que avanza el trayecto, los protagonistas van descubriendo más de sus vidas y por qué se han reencontrado.
Si la cosa va de ponerse un poco crítico y reflexionar, Selftape y Feel Good son muy buenas opciones. Ambas se tratan de autoficciones producidas y dramatizadas por las actrices que las protagonizan. La primera, española (Filmin), está recién salida del horno, se estrenó el 4 de abril. Va de una historia ficticia de las hermanas Joana y Mireia Vilapuig, quienes triunfaron en la infancia con Pulseras rojas, la serie catalana. En su única temporada, ahonda en la precariedad a la que se ve volcada la generación Z, especialmente cuando deciden forjar su propio camino. Narrada desde lo doméstico y familiar, cuestiona cómo el éxito temprano puede terminar siendo una carga a lo largo de la vida. Habla también del machismo de la industria audiovisual, las dificultades en la misma, la fragilidad en la juventud y el vínculo entre las hermanas. Una mirada divergente y actual que rompe moldes, para un público más exigente.
Feel Good (Netflix), por su parte, se trata de una autoficción de Mae Martin, la comediante canadiense. La historia se centra en la vida de la misma y su novia George (Charlotte Ritchie), y aborda temas como la adicción, la identidad sexual y la salud mental. Una mirada real y cercana a las relaciones homosexuales entre mujeres, más allá del estereotipo promiscuo y tóxico.
La próxima vez que te enfrentes a la pantalla y no sepas qué elegir, no te agobies. Dale la oportunidad a cualquiera de estas series, que, además de requerir poco tiempo, te encantarán.