«La Ciudad de Arousa sí que existe»

Susana Luaña Louzao
Susana Luaña VILAGARCÍA / LA VOZ

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Villaronga cree que nacer en Vilagarcía es una suerte, y elegirla para vivir, una sabia decisión.
Villaronga cree que nacer en Vilagarcía es una suerte, y elegirla para vivir, una sabia decisión. martina miser< / span>

Su nuevo libro explica las claves que hicieron de Vilagarcía la cabecera de la comarca

22 dic 2013 . Actualizado a las 06:55 h.

manuel villaronga garcía escritor y periodista

-Políticamente, Vilagarcía no es cabecera de comarca.

-No es novedad, ya era así en el siglo XIX, cuando se discutía que no se tenía representación en la Diputación provincial. Los caminos de la política son inescrutables, pero ahora hay diputados autonómicos y senadores, y está claro que los líderes no se compran. En todo caso es la sociedad la que tira del carro. La mayoría de los clientes que van a McDonald?s son de fuera de Vilagarcía, y cuando todas las franquicias quieren estar aquí será por algo.

-Entonces, ¿la Ciudad de Arousa existe?

-Claró que sí que existe. Está pasando lo mismo que pasó en esa época, una unidad geográfica tenía tres unidades administrativas. El periodista Benito Leiro le llamó Planeta Arousa... Se le puede llamar así o Ciudad Arousa, pero existe.

-Vale, me ha convencido. Pero entonces, ¿qué le falta para convencernos a todos?

-El problema de Vilagarcía y del resto de la comarca es pensar globalmente y actuar localmente. No tiene sentido, por ejemplo, que en la promoción turística cada uno haga la guerra por su cuenta. Las posibilidades son inmensas. Cuando Dios creó el mundo y al séptimo día descansó, posó su mano y con los dedos creó las rías. ¡La ría de Arousa es el dedo gordo!

-¿Y usted por qué nos lo cuenta?

-De pequeño tenía un libro que decía ?dime por qué, dime cuándo, dime cómo?. A mí el porqué me volvía loco, quería saber por qué vivía aquí, por qué era de esta manera... A partir de ahí empecé a tirar del hilo, y si ahora lo puedo compartir ya es la bomba. Si sabes de dónde vienes es mucho más fácil que sepas dónde estás y a dónde quieres ir. Los lectores van a ver las calles de la ciudad de otra manera.

Hace cien años lo contaba Francisco Porto, Núñez Búa o Lisardo Barreiro. Ahora lo cuenta Manuel Villaronga. Lo hizo ya en el pasado con la publicación de libros como Vilagarcía y el mar o Vilagarcía, Carril y Vilaxoán, y lo hace ahora con La ciudad de Arousa. Mil años buscando un lugar en el mapa. El libro que se presenta mañana a las ocho de la tarde en el Salón García tiene prólogo del catedrático Xaquín Álvarez Corbacho. «Lo elegí por ser uno de los mayores expertos y defensores del municipalismo, y fue alcalde de O Grove. Me apetecía mucho y fue una conexión total, hizo un prólogo que es pura delicatesen» . El volumen tiene 512 páginas con 350 mapas, grabados, fotografías e infografías.

-Son muchas páginas. Convénzame para que lo lea.

-Es fácil. Está dibujado tanto el DNI como buena parte del ADN de esta ciudad. Está planteado como una crónica periodística para que llegue al público en general que no está interesado por la Historia pero sí quiere saber la del municipio donde nació o donde decidió vivir, que es una sabia decisión. Los que me conocen saben que creo que el rigor no está reñido con la amenidad, que se pueden contar las cosas de manera que se entiendan, y hay documentos y escritos que van a arrancar más de una sonrisa. Cómo algunos defendieron su identidad frente a la de los demás creó situaciones que son propias de una película de Woody Allen. Va a sorprender, porque hay cosas que pasan ahora que ya las hacían nuestros tatarabuelos. Se plantea como una mezcla de paisaje y paisanaje, el paisaje está ahí y lo modela el paisanaje. Como consecuencia de ello, hay que ponerle nombre a las cosas, ya que el paisaje va creando identidades que se mantienen. Carril sigue siendo Carril, Vilaxoán sigue siendo Vilaxoán, y Vilagarcía sigue siendo la city, y eso es bueno, porque la suma de tres identidades son tres fuerzas, y tres fuerzas pueden mucho más que una sola.

-¿Cree entonces que están equivocados los que siguen defendiendo las identidades de Carril o Vilaxoán?

-Yo no digo que estén equivocados, pero con respecto a lo que pasó hace cien años hay que ser riguroso y no crear mitos.

-¿Qué fue la Ciudad de Arousa?

-Fue un proyecto económico, político y social que trascendía los tres ayuntamientos. De hecho el concello unificado se iba a llamar Ciudad de Arousa, no Vilagarcía. En lo urbanístico ya se confundían los términos municipales, y lo mismo pasaba con el carácter social. Luego está el puerto y Cortegada. El puerto de Carril, que tuvo un pasado esplendoroso, ya no daba para más y se trasladó a Vilagarcía, pero a finales del siglo XIX a Vilagarcía le pasó lo mismo y solo podía crecer por la costa y a costa de Vilaxoán. Era un problema de subsistencia económica que dio lugar a la iniciativa pública y la privada; la pública, con la ampliación del puerto, y la privada con el megaproyecto de Cortegada, que iba mucho más allá de un palacio para el rey. Era una gran especulación urbanística para trasladar aquí lo que era San Sebastián, y detrás había gente que tenía intereses en La Toja e intereses en Cortegada, de ahí que se quisieran unir ambas islas y se crease la entelequia de la Ciudad de Arousa.

-Pero lo de Cortegada fracasó. ¿Qué queda de todo aquello?

-Desde ese momento, Vilagarcía marcó su carácter como cabecera de comarca.

-¿Y lo sigue siendo?

-Sin duda alguna.

-Pues hay quien lo duda.

-Pues que demuestren lo contrario. Hoy vivimos las consecuencias de aquello. No hay ningún caso en España con la presión informativa que tiene esta ciudad, y eso viene de donde viene, porque mucho antes de que existiese Facebook, aquí el que tosía ya salía en la foto. En deportes tenemos campeones nacionales y olímpicos, y eso no es casualidad, es consecuencia de iniciativas como que este año se celebrase aquí la primera Semana Náutica de España. Fuimos los primeros en declararle la guerra a los franceses, en jugar al fútbol... Eso es carácter.

-Pero los puertos están en reconversión, el comercio ya no es el que era y no digamos nada del turismo...

-Las estadísticas dicen que entre un tercio y el 40 % del comercio de la comarca está en Vilagarcía. Pero es verdad que el mundo está cambiando y hay que adaptarse a él. No se sabe lo que va a pasar con el comercio electrónico o con los medios de comunicación. Y sí, yo creo que a Vilagarcía le falta tener claro un rumbo definido.