El errático rumbo de la residencia

Rocío Pita Parada
rocío pita parada FERROL / LA VOZ

FIRMAS

JOSÉ PARDO

Antes del Soutomaior, se barajaron más de media docena de ubicaciones

26 may 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Casi un cuarto de siglo después del nacimiento del campus ferrolano la ciudad continúa sin residencia pública universitaria. Algo que, previsiblemente, cambiará a partir del próximo curso, cuando se habiliten las primeras plazas en el antiguo centro de menores Soutomaior. Para llegar a este hito han tenido que pasar más de dos décadas de desencuentros, ofrecimientos, rechazos y hasta proyectos. Pero sobre todo, falta de acuerdo sobre su ubicación. Tanto, que se llegaron a prever, al menos, media docena de ubicaciones distintas.

La necesidad de hallar un lugar donde los estudiantes del flamante campus pudiesen alojarse se remonta prácticamente a su creación, en 1990. Y se hizo acuciante con el desarrollo paulatino de nuevas titulaciones y la exigencia de conseguir fijar alumnos. La búsqueda comenzó en plena plaza de España. Allí, donde hoy se yergue el edificio administrativo de la Xunta, se preveía a principios de los noventa un edificio de servicios múltiples con un centro de la tercera edad, oficinas y una residencia universitaria. En el pleno del viernes, el independiente Juan Fernández recordaba los «tumbos» que había dado la residencia, y recordaba que en los años noventa también se habló de ubicarla en O Bertón. Ninguna prosperó y en 1997, el entonces rector, José Luis Meilán Gil, confiaba en disponer del cuartel del Baluarte del Infante, en la avenida do Rei, tras dos años de negociaciones con la Zona Marítima del Cantábrico, para habilitar un centenar de plazas de alojamiento. Pero el Concello tenía sus propios planes, con la intención de ceder una parcela en la avenida de Esteiro, en el cruce con la de Vigo, que no llegó a prosperar.

Incluso fuera del municipio

Se llega así al año 2000, en el que el Ayuntamiento proyecta la residencia, con capacidad para 90 personas, en esa misma avenida, un poco más abajo. Por esa época se hablaba ya del Sánchez Aguilera, y de forma paralela a Esteiro, la ubicación considerada más apropiada por su cercanía al campus, en verano del 2001 surgió una sorpresa: Narón ofrecía a la UDC parcelas para su construcción. Se propuso O Couto y A Gándara pero la opción con más opciones era Vosa, en el Alto del Castaño, donde hoy se levantan el Pazo da Cultura y Ciudad Europa.

Pero el convenio con Defensa hizo que desde el 2004 tomase cuerpo la candidatura del Sánchez Aguilera, aunque no fue hasta el 2006 cuando Universidad y Concello parecieron salvar sus diferencias y la situaron allí, previendo un nuevo edificio. Desde abril del 2008, en tres de los viejos pabellones del acuartelamiento, tras una rehabilitación que aún no ha llegado.

el campus ferrolano acumula 23 años de vida sin plazas públicas de alojamiento

La plaza de España, la avenida de Esteiro y Narón fueron algunas de las propuestas