La Administración aboca a la ruina las casas de los maestros

Bea Costa
bea costa VILAGARCÍA / LA VOZ

FIRMAS

MARTINA MISER

Xunta y concellos evitan hacer obras para mantenerlas habitables

27 dic 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

En los años cuarenta, cuando los maestros cobraban una miseria, el Estado decidió darles casa gratis. Muchas de aquellas viviendas todavía siguen en pie, aunque la Administración no está por la labor de que sea por mucho tiempo. Ni los concellos están realizando las obras de mantenimiento que son de su competencia, ni la Xunta afronta las obras estructurales que requieren buena parte de estos inmuebles, ya muy deteriorados por el paso del tiempo. Ante este escenario, a los docentes adjudicatarios les quedan dos opciones: o renunciar a ellas o gastar de su bolsillo para que las casas sigan siendo habitables.

Y como gastar en lo que no es de uno no resulta buen negocio, muchas viviendas quedan vacías y acaban en la ruina. En los concellos nada tienen que objetar al respecto. Al contrario, pues cuanto antes queden libres más fácil resulta tramitar ante Educación su desafectación y disponer así de ellas. En muchos casos lo han hecho ya: en Vilagarcía, por ejemplo desde 1998 se han desafectado As Saíñas, Zamar, O Pedroso, Castroagudín, Cornazo y Trabanca Sardiñeira. Pero, aun así, todavía quedan muchas casas escolares en manos de la Consellería de Educación: 77 en toda la comarca, de las que 45 están ocupadas, lo cual no quiere decir que lo estén en régimen de primera vivienda.

En O Grove, tras años de espera, están ahora tramitando el expediente de desafectación de las viviendas del Rosalía de Castro para darles en el futuro un uso público, que todavía está por concretar. Y el gobierno de Cambados aspira a poder hacer lo propio más pronto que tarde con las viviendas del colegio Antonio Magariños, aunque allí no lo tienen tan fácil porque cinco de las doce casas están ocupadas.

Cuestión de prioridades

Una de las que quedaron vacías está siendo utilizada por el centro como almacén, pero carece de agua y luz porque el Concello no quiere consolidar esta edificación. Gobierno local y padres opinan que estos terrenos serían de gran utilidad para ampliar el patio del colegio, pero el profesorado cree que antes de gastar el dinero en una pala, hay otras prioridades, como la de arreglar el tejado del edificio y la pista deportiva, donde la lluvia de este otoño ha hecho estragos.