Fotografía de concursantes

jerónimo martel OURENSE

FIRMAS

Pablo Araujo

Premio Purificación García en el Simeón y Maureen Ton en Visol

10 dic 2012 . Actualizado a las 06:00 h.

En el Centro Cultural de la Diputación y hasta el día 16, se exponen las fotografías premiadas y seleccionadas del Premio Bienal de Fotografía Purificación García 2012. Como es sabido, pueden optar a este premio los residentes tanto de España como de Portugal mayores de dieciocho años, con libertad tanto temática como técnica, siempre que sea mediante una obra inédita y reciente. El jurado del premio es de lujo. Lo componen el director del Museo Reina Sofía; la directora del pequeño-gran museo Jeu du Paume de París; el fotógrafo español Chema Madoz -a quien el Reina Sofía dedicó la primera exposición retrospectiva celebrada a un fotógrafo español vivo- (y que dirige las campañas de moda de Purificación García); el comisario de exposiciones Sérgio Mah; y, en fin, el crítico de arte Alberto Martín. Los tres premios del concurso están dotados, respectivamente, con 15.000, 12.000 y 10.000 euros, que equivalen a una millonada: por ejemplo, el primero a cerca de dos millones y medio de las antiguas pesetas.

Me queda solo advertir aquí y ahora sobre una original cláusula incluida en las bases de este premio para esta actual convocatoria. Encabeza la base primera una novedad: la de una preselección de obras requerida a los artistas interesados en el concurso, que les exige el envío por correo electrónico de un dossier personal inclusivo de la ficha de inscripción donde consten el nombre artístico más nombre y apellidos, así como un currículo vitae con lista de exposiciones individuales y colectivas, premios adquiridos o colecciones participadas, y, en fin, hasta incluso -si se presta el interesado-, no solo ya la fotografía de la obra presentada, sino incluso las de todas y cada una que puedan integrar un complemento de proyecto o serie.

A propósito de una anterior edición del premio, incluí en aquella crítica mi juicio personal de que componía una exposición desigualada. Pues bien, esta ahora mantiene un nivel de igualdad en la calidad primoroso. De más de novecientas obras concursantes, únicamente se seleccionaron diecisiete, todas de fotógrafos conocidísimos que pueblan la actualidad fotográfica de postín. Si acaso, la excepción que nunca puede faltar ha sido la de la mención especial concedida a Carla Cabanas, por su magnífica fotografía titulada Albúm desconhecido (2012, intervención sobre impresión con chorro de tinta). Quiero añadir una curiosa anécdota dada con respecto al segundo premio concedido a Jaime de la Jara por su obra Place one, que el catálogo de la muestra apunta esencialmente a una performance sobre la estética del ready-made (representa un sofá de color detonante volcado en el suelo). Gente que ha viso la exposición, se ha extrañado de ese premio, comparando dicha obra con otra bellísima en que también aparece un sofá tirado en el suelo. No han entendido que esa performance acerca de un «objeto encontrado» -sacado de la vida ordinaria, para hacerlo arte surrealista- no busca la belleza formal, sino uno de los juegos de arte de la idea con objetos, que tanto gustan al jurado Chema Madoz.

Una trotamundos

En la galería Visol y hasta el día 15, expone, bajo el título Barriers la fotógrafa Maureen Ton (Estado de New Jersey, Estados Unidos, 1980). Tiene una licenciatura de diseño gráfico y un máster en comunicación digital; y es profesora en posgrado de diseño interactivo en la Northeastem University, siendo considerada por otra parte una exploradora psicogeográfica. Dedica su tiempo libre a su vocación de trotamundos fotográfica. Su exposición, sobre las barreras que debe superar el fotógrafo, está enmarcada en Berna, Galway y Sidney. Centra las barreras en los no-lugares, con la originalidad de que incluye entre estos también a los lugares naturales inhóspitos.