La proeza de ir a estudiar en tren

ANA F. CUBA MOECHE / LA VOZ

CERDIDO

CESAR TOIMIL

«Parece que os rapaces de Moeche e Cerdido non teñen dereito a que o Feve chegue ata aquí», critica una madre

01 oct 2017 . Actualizado a las 11:35 h.

Los horarios del Ferrocarril de Vía Estrecha (Feve), que ahora gestiona Renfe, no se lo ponen fácil a muchos estudiantes de parte del municipio de San Sadurniño, Moeche o Cerdido. «Apura coas fotos que temos moita fame», comentaban los chavales el viernes al llegar a la estación de Pedroso, en Narón, sobre las 14.45 horas. Vanessa Caaveiro Picos, vecina de Labacengos (Moeche), estudia segundo de Bacharelato en el IES Concepción Arenal, en Ferrol. Sale de clase a las 14.10 horas y el primer tren que parte de la estación ferrolana hacia su casa no arranca hasta las 15.30.

La única opción que le queda, para no tener que esperar casi hora y media sin haber comido, es subirse al ferrocarril de las 14.20 y apearse en Pedroso (Narón), donde la recogen sus padres con el coche. «Me van a buscar y tardamos otros 20 minutos para llegar a casa, así todos los días de la semana; pero es que si vengo en el tren de las 15.30 no estoy en Labacengos hasta las 16.12 y esa sí que no es hora para comer», opina esta joven. «El tren de las 14.20 tendría que acabar en Cerdido -demanda-. Es un servicio básico, imagínate que mis padres me tuvieran que llevar a Ferrol cada día».

«Pero non todos os pais poden ir buscalos a Pedroso e algúns xantan en Ferrol porque se non fáiselles moi tarde, o que supón outro gasto, ademais da hora á que chegan á casa», abunda Eva María Quetti. «A miña filla sufriuno todos os días o ano pasado, parece que non temos dereito a que veña o tren polo menos ata Cerdido», denuncia este vecina de Moeche. El problema se agrava con las frecuentes demoras. «El tren se queda esperando en Xuvia a que pase el otro, que viene con retraso, y el otro día estuvimos allí hasta las tres. Pero hay veces que no llega y tenemos que ir en taxi de Xuvia a Pedroso, y así se tarda mucho más», relata Caaveiro Picos.

La situación afecta a decenas de estudiantes de Moeche y San Sadurniño (el servicio de las 14.20 culmina allí, a las 14.46, pero la ubicación de la estación no favorece a los vecinos de varias zonas del municipio), y alguno de Cerdido. «Los horarios no se ajustan, los trenes se averían, no hay revisor y no cobran... Parece que lo que quieren es abandonar el servicio, que es muy importante y que tantos esfuerzos costó», enfatiza Pilar Pazo, que se desplaza a diario a Pedroso para recoger a su hija. Su familia trabajó en la construcción de la vía y ahora lamenta la agonía del ferrocarril, «cómodo y barato».