El Racing ha disputado otros tres play-off de asenso a Segunda B, y de dos de ellos salió victorioso
21 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Corría el año 2013 cuanto el Racing de Ferrol terminó la campaña como campeón de Tercera. Llevaba otras dos temporadas en esta categoría, y fue a la tercera cuando consiguió alzarse campeón del grupo gallego y clasificarse para disputar el play-off de ascenso.
Aquella temporada fue de récords. El equipo gallego terminó la liga regular sumando un total de 97 puntos, estableciendo un nuevo récord en el grupo gallego de la categoría. «Fue una liga regular espectacular con más de una treintena de victorias y toda la temporada regular líderes. El equipo llegó eufórico a esa eliminatoria de campeones, estaba eufórico todo el mundo. Había una comunión entre el equipo y la afición como yo no recuerdo en muchos años», explica el historiador del Racing de Ferrol, Jorge Deza.
Tenía así la primera oportunidad de materializar el ascenso. Y no la desaprovechó. En la promoción de campeones el Racing se vio las caras con el Laudio, campeón del grupo del País Vasco. Un grupo que nunca se antoja fácil pero, al menos, el bombo quiso entonces darle suerte al Racing con el factor cancha a su favor. La ida se celebró en Laudio y el equipo verde consiguió empatar a uno, un resultado que garantizaba jugar el pase en casa y ante los suyos.
En la vuelta en A Malala, la afición vibró y vivió una fiesta con un partido épico en el que el Racing se impuso por la mínima, 1-0 con un gol de Marcos Álvarez. «Siete mil personas apoyaron el equipo ferrolano en el decisivo partido y dieron a las gradas de A Malata un aspecto espectacular para un encuentro de Tercera», recogía entonces La Voz de Galicia. Con un marcador global de 1-2, el Racing conseguía el ansiado ascenso a Segunda División B. «Todas las eliminatorias son difíciles, pero el Racing jugaba ganador. Los dos partidos fueron a pedir de boca, sobre todo el de Ferrol, con un ambiente enorme en A Malata», recuerda el historiador.
El rival de entonces salía del grupo de Euskadi, un grupo que siempre se antoja complicado. «A toro pasado siempre podemos ver y decir si aquel rival fue fácil o difícil, pero, a priori, todos son complicados. Pero no importaba, aquel Racing iba con una inercia competitiva tremenda», reconoce Deza.
Marcos Álvarez, el talismán
Los jugadores de aquellos años han pasado a la historia del club. «Estaba gente como Manu Barreiro, Jorge Rodríguez, Yago Iglesias, Dani Rodríguez... gente increíble. E hicieron una temporada espectacular porque batieron los récords de la categoría. El equipo estuvo toda la temporada líder, de la primera a la última jornada. Y así lo normal era acabar ascendiendo. El recuerdo de aquella temporada fue un preludio de lo que vino después», destaca Deza.
De entre todos los nombres de aquella plantilla, sin duda, el que cobra más importancia ahora es Marcos Álvarez.
El ortegano parece un talismán de A Malata. Ha regresado esta temporada a su casa y todo el mundo quiere que repita su gesta. Fue el autor del épico gol de este partido de regreso en A Malata que otorgó la victoria y el ascenso a su equipo. «La jugada de un gol para la historia la inició Pablo Rey con un robó de balón en la banda. Tras irse de varios contrarios, como siempre, hizo el recorte para dentro y tuvo la visión de meter un balón al hueco que el delantero ortegano aprovechó y envió con precisión el balón al fondo de la red», relataba la crónica del partido que publicó La Voz hace seis años.
Todo lo vivido en esa temporada histórica sirvió para hacer piña con la afición y comenzar a construir un lustro de lo más exitoso. «Fue el comienzo de un muy buen lustro, estuvieron varias temporadas jugando la fase de ascenso a Segunda en al época de Aira», reconoce el historiador.
Los otras dos fases de ascenso
El club ha disputado otras dos fases de ascenso a Segunda B. Una fue en la temporada 1991 a 1992, de la que salió victorioso. Entonces se jugaba por sistema de liguilla y el Racing se enfrentó al Caudal Deportivo, Móstoles y León. La otra fue en 2010-2011. El equipo jugó primero contra el Binefar, al que superó, pero cayó eliminado por el Izarra.
Hubo otro ascenso a la misma categoría en 1988. Entonces fue directo, no tuvieron que disputar ninguna eliminatoria.