Las cobayas cotizan al alza como animales de compañía

B. A.

FERROL

CESAR TOIMIL

Los veterinarios advierten que este tipo de roedores requieren al menos una visita anual a la clínica, al igual que perros y gatos MASCOTAS

24 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

A las cobayas o conejillos de indias se les deben numerosos avances científicos -hace ya mucho tiempo que son empleados para la experimentación en el campo de la investigación biomédica-, pero recientemente también se les ha empezado a apreciar mucho como animales de compañía, sobre todo entre los más pequeños de la casa. Lo cuentan en las tiendas de alimentación de animales de la zona, donde la demanda de productos para estos pequeños y dóciles roedores ha ido a más en los últimos años, desplazando a los hasta ahora imbatibles hámster. «A los niños les gustan muchísimo porque son pequeños y apacibles, lo que les permite cogerlos en la mano para acariciarlos. Además, a los padres les resulta muy cómodo tener una mascota de este tipo en casa, porque a las cobayas no hay que sacarlas a pasear y, a diferencia de los hámster, que son muy inquietos, si salen de la jaula se mantienen tranquilos y no pasa nada», comenta un profesional del sector de la comarca.

Por si eso fuera poco, el tener un animal de este tipo en casa pueden resultar muy beneficioso para los niños, ya que dándoles de comer, atendiéndoles o manteniendo limpia su jaula, los pequeños se sienten útiles y aprenden a ser responsables.

Cuidados

Junto con las cobayas, últimamente también han crecido en popularidad como mascotas otros animales pequeños y fáciles de cuidar en casa, como son las chinchillas, los ratoncillos blancos, los jerbos o los hurones.

A diferencia de los propietarios de perros y gatos, los dueños de este tipo de mascotas no los suelen llevar tanto al veterinario, pensando erróneamente que no necesitan demasiada atención, y muchas veces lo hacen cuando el animal ya está muy mal y no se puede hacer nada por él.

Por eso -y aunque las cobayas no requieren vacunaciones- los veterinarios recomiendan llevarlas a la clínica al menos una vez al año para hacerles una revisión y desparasitarlas en caso de que fuera necesario.

Según explican los profesionales del sector, estos animales no requieren cuidados muy costosos pero sí ejercicio diario controlado fuera de la jaula en casa o, aún mejor, al aire libre, además de una alimentación adecuada a base de heno, vegetales fibrosos y cereales, una dosis de vitamina C diaria y ambiente fresco en verano. Asimismo, no se debe abusar de los piensos que se comercializan específicamente para estos roedores, aunque sí se pueden utilizar como premio en el proceso de educación de las cobayas.