La Banda de Gaitas Agarimo de Catabois demostró el pasado sábado que con trabajo y dedicación no hay nada imposible. Y es que la agrupación musical finalizó en tercera posición la última edición de la Liga Galega de Bandas de Gaitas que se celebró en el Concello pontevedrés de Mos solo por detrás de bandas que los superan ampliamente en presupuesto.
Este certamen se divide en tres grados y las gaitas ferrolanas partían en el primero de ellos, la máxima categoría de la comunidad. En el concurso participaban 30 bandas pero, en el primer grado, únicamente tenían que competir contra 10. Y entraron en podio, superados por la Banda de Gaitas Nova Fronteira, de Ourense, que obtuvo el segundo puesto y por la Banda Ledicia y Fornelos, de Pontevedra, que se proclamó campeona.
La agrupación de Catabois, que lleva cerca de 20 años participando en este certamen y ha ascendido progresivamente hasta el primer grado, consiguió algo impensable hasta el momento. «Es cierto que este año esperábamos logra el tercer puesto porque trabajamos para ello, como siempre. Hay que darse cuenta de que este no es solo nuestro mejor resultado sino que también es la mejor clasificación de todas las bandas de la provincia de A Coruña en este certamen», explica el director de la agrupación, Marcos García.
Además, el gran mérito de este tercer puesto proviene de la diferencia abismal de presupuesto con sus competidoras de Ourense y Pontevedra, que cuentan con unas escuelas subvencionadas por sus respectivas Diputaciones. «La Diputación de Pontevedra otorga a las escuelas de su provincia una subvención de 90.000 euros y la de Ourense más de 50.000 euros. Aquí en Coruña se destina cero euros a las escuelas de las bandas», comenta García. A pesar del hándicap que supone competir en inferioridad de condiciones económicas, las gaitas de Catabois intentarán, en la edición del próximo año, repetir este fabuloso tercer puesto.
música Liga Galega de Bandas