Ferrol, Barallobre y Mugardos sumaron 2,3 millones de euros el pasado año
03 ene 2012 . Actualizado a las 12:41 h.A pesar de las dificultades por las limitaciones extractivas de las zonas C y de que solo se pudo sacar almeja babosa tres de los doce meses del pasado ejercicio, los pósitos de la ría lograron, en conjunto, mejorar sus cifras con respecto al 2010.
Tal y como se plasma en las estadísticas oficiales de la Consellería do Mar, entre el 1 de enero y el pasado 31 de diciembre los pósitos de Ferrol, Barallobre y Mugardos subastaron un total de 315.000 kilos de mariscos, fundamentalmente, y pescados. En el año anterior habían sido 277.000 kilos. En ingresos, se lograron casi 2,3 millones de euros, un 21% más que en el 2010, cuando las subastas en las tres rulas dejaron cerca de 1,9 millones de euros.
Si el análisis se hace cofradía por cofradía, también se comprueba que todas mejoran. Es la de urbe naval la que más ha facturado, con un total de 1,4 millones de euros. Barallobre ha ingresado 614.000 euros y Mugardos 231.000.
Así, aunque la situación del marisqueo en la ría local dista todavía mucho de ser lo que fue a comienzos de la década, los números mejoran, lo que se traduce en una mayor actividad y en más ingresos tanto para socios de los pósitos como para las propias cofradías, que se quedan con un porcentaje de todo lo que se subasta.
Las causas
¿Cuáles son las causas de que se haya dado este tímido repunte? Varias. La primera es que los tres meses en los que se ha extraído y subastado almeja depurada de forma biológica en aguas limpias han sido mejor seleccionados que en el 2010, lo que ha permitido abrir más mercado y mejorar los ingresos.
Pero también ha habido otros motivos para la reactivación de los números. Y en eso ha tenido que ver de forma determinante la cofradía de Ferrol.
Durante el 2011 se produjeron varias ventas de vieira al producirse una bajada de la toxina ASP (amnésica), lo que permitió abrir una línea de negocio que ha reportado importantes beneficios.
También se ha producido un incremento de los ingresos propiciado por la recuperación de las subastas diarias de percebe en la lonja de Curuxeiras. Un mercado que en los últimos años no existía y se derivaba a otras rulas, como las de Cedeira o A Coruña.