25 ene 2001 . Actualizado a las 06:00 h.
Las intensas lluvias de los últimos días han situado al césped del estadio de A Malata bajo mínimos, por lo que, suponiendo que se pueda disputarse el partido del domingo frente al Jaén, quedará, nuevamente, especialmente deteriorado. Hay zonas del campo que están completamente encharcadas. La parcela reparada aguanta bien, aunque ya está demasiado blanda. La junta directiva, consciente del problema, cruza los dedos para que pare de llover o el campo aguante, aunque la situación parece que podría complicarse. También está «tocado» el campo de entrenamiento, de hecho, el Racing no quiso pisarlo ayer para no deteriorarlo mucho más.