Las fuerzas de seguridad liberan a casi 1.200 esclavos sexuales y laborales

Alfonso Torices MADRID / COLPISA

ESPAÑA

Efe

Ejecutaron el pasado año 300 operaciones contra la trata de seres humanos

14 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Unidades de Policía Nacional y Guardia Civil liberaron el año pasado a un millar largo de personas esclavizadas por organizaciones criminales que se enriquecen con su explotación sexual, laboral o forzándolas a delinquir o a ejercer la mendicidad. Supone un aumento del 12 % en la cifra de rescatados, entre ellos 26 menores. Es el principal resultado del balance de las operaciones desencadenadas en España contra el negocio mafioso de la trata de seres humanos.

Las 1.180 víctimas rescatadas de prostíbulos, carreteras, pisos o de insanos talleres o almacenes son los y las esclavas del siglo XXI, muchas de ellas prácticamente secuestradas por organizaciones que las introdujeron de forma clandestina en España y las retienen y explotan hasta que devuelvan la abultada deuda que tiene contraída, que normalmente crece día a día, lo que hace casi imposible saldarla alguna vez. Entre las liberadas hay una mujer y una niña, española y paquistaní, vendidas a redes de trata con el objetivo de destinarlas a matrimonios forzados.

Son las víctimas de una actividad criminal de tal magnitud que es la más lucrativa tras el tráfico de drogas, con unos ingresos similares a los del mercado ilegal de armas. Esclavo no es una exageración, es la denominación que dan a esta lacra los propios jueces y policías. Los rescatados de las garras de 78 organizaciones criminales no solo eran expoliados en la prostitución, también eran explotados en negocios clandestinos, en el campo, en la delincuencia, la mendicidad de semáforos, esquinas y supermercados, o vendidos para matrimonios forzados. En estas redadas se arrestó a 693 de quienes se enriquecían vejándolos, despojándoles de todo derecho y usándolos como meras mercancías.

Más de 500 en burdeles

De los burdeles, parques o calles fueron liberadas 564 víctimas. La práctica totalidad son mujeres (entre ellas catorce niñas), procedentes de capas muy vulnerables de la sociedad española, pero sobre todo de Colombia, Rumanía, República Dominicana, Venezuela, Brasil y Paraguay. Cáritas estima que hasta el 90 % de las mujeres que ejercen la prostitución en España no lo hacen de forma voluntaria y que al menos el 80 % son extranjeras. Las oenegés consideran que trata con fines de explotación sexual y prostitución en España son prácticamente sinónimos.

Estas liberaciones, en cualquier caso, son solo la punta del iceberg de una polémica actividad que el Congreso prohibirá si PSOE y PP sacan adelante una ley que está bloqueada desde hace seis meses. Una forma de explotación alimentada por una sociedad, la española, la tercera del mundo con más usuarios de prostitución según la ONU, y por una potente industria en la que, al menos hasta que el Parlamento decida si aprueba o no la reforma, no es delito regentar uno de los cientos y miles de prostíbulos o chulear a estas mujeres. Las estimaciones policiales, más bien conservadoras, apuntan a que en España puede haber entre 40.000 y 45.000 mujeres prostituidas, de países entre los que además de los anteriores destaca Nigeria. Una actividad clandestina que podría mover unos 20.000 millones de euros muy negros al año.

La otra mitad de las liberaciones del 2022 fueron casi todos esclavos laborales. En concreto, 605 rescatados. En este caso, la mayoría fueron hombres, entre ellos cinco niños, llevados a la fuerza o con engaños a sótanos, infraviviendas, barracones, naves u otros locales donde los hacinan y les obligan a trabajar en jornadas eternas, sin medidas de seguridad ni derechos. Buena parte de los rescatados por las fuerzas de seguridad en las 24 operaciones con 260 detenidos tienen entre 23 y 27 años y proceden de Marruecos, Colombia y Senegal, con Rumanía muy presente entre quienes fueron atrapados por las redes mafiosas en su propio país.