La CUP se une a la presión de Junts para que Aragonès presente una cuestión de confianza
ESPAÑA
Los anticapitalistas ven la legislatura agotada, pero rechazan ir a elecciones
14 oct 2022 . Actualizado a las 19:31 h.Después del calificativo de «ilegítimo» dedicado por Junts al nuevo Gobierno de Pere Aragonès y de insistir en que el republicano debería someterse a una cuestión de confianza en el Parlamento catalán para saber con qué apoyos cuenta, ahora es la CUP la que hace batalla con la misma causa.
ERC dispone de 33 diputados de los 135 de la Cámara, los mismos que el PSC, que ganó las elecciones. Los cupaires también quieren que el presidente presente una cuestión de confianza.
La portavoz de la CUP en el Parlamento, Eulàlia Reguant, aseguró ayer que su formación ve «agotada» la legislatura. La anticapitalista defendió que la ruptura del Gobierno catalán muestra que la comunidad se encuentra «ante un final de ciclo que hace tiempo que se venía evidenciando», y por eso reclama que el Ejecutivo explique su programa político y los soportes con los que cuenta, pero no entra a valorar su «legitimidad».
«El Gobierno debe rendir cuentas ante el Parlamento. No tenemos un sistema presidencialista. Es un ejercicio de transparencia someterse a una cuestión de confianza», insistió Reguant. En cambio, descartó reclamar elecciones, porque el paso por las urnas «no modificaría el escenario político». La diputada anticapitalista auguró que la legislatura «se encamina al final en los próximos meses», y criticó que ERC y Junts hayan gobernado «sin una mínima estrategia compartida ni una hoja de ruta clara» y con políticas que solo han servido para contentar a las élites, dijo. A Junts le reprochó que «su capacidad de llegar a acuerdos haya quedado anulada por la retórica y la intransigencia de los sectores que han ganado la consulta».
Moción de censura
Por su parte, el líder de Cs en el Parlamento, Carlos Carrizosa, insistió en pedir elecciones para aprovechar la ruptura independentista y abrir una nueva etapa, para lo que invitó al PSC a sumarse. También le propuso a Salvador Illa que presente una moción de censura a Aragonès y le ofreció el apoyo de CS (6 diputados). En cualquiera de los casos, entre el PSC (33), Cs (6) y En Comú Podem (8) lograrían 47 escaños de los 135.
«El Gobierno de los ex»
Asimismo, la portavoz de la CUP criticó los nombramientos de consejeros con pasados vinculados al PSC, Podem y CDC: «Es el Gobierno de los ex. Esto solo intenta esconder su incapacidad de llegar a acuerdos parlamentarios». Pese a todo, Reguant señaló que se abre a negociar los presupuestos.
En la posición contraria se encuentra Junts, que, además de no aclarar qué hará con los presupuestos que ya tenía diseñados su consejero Jaume Giró, quiere que Aragonès se someta a una cuestión de confianza, por «radicalidad democrática», para aclarar si su nuevo Ejecutivo dispone de una mayoría antes de hablar de las cuentas. El presidente del grupo parlamentario de Junts, Albert Batet, aseguró que el de ERC «es el Gobierno más débil de la historia de Cataluña».