El presidente de la CEOE defiende los indultos a los presos del «procés» para «normalizar» las cosas

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi
El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi Eduardo Parra | Europa Press

Los empresarios de Cataluña presionan a Casado para que apoye la medida

01 jul 2021 . Actualizado a las 12:01 h.

 «Si esto al final acaba en que las cosas se normalicen, pues bienvenidos sean los indultos». El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, recibió ayer un inesperado espaldarazo por parte del presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, a su tesis de que los indultos a los presos del procés son la mejor manera de normalizar la situación en Cataluña. El máximo representante de los empresarios españoles provocó un terremoto político con unas declaraciones en las que parecía abogar por la concesión de la medid de gracia. Garamendi sostuvo que todo lo que sea «acercamiento y diálogo es bueno» y reclamó alejarse de «las posiciones maximalistas y más radicales».

Tras comprobar el revuelo provocado por sus palabras, tanto entre dirigentes políticos de la derecha como entre los propios empresarios, Garamendi trató de matizarlas, precisando que cuando habla de «normalizar» se refiere a que las empresas que abandonaron su sede social en Cataluña durante el procés puedan regresar. «Sobre los indultos no voy a contestar, no soy político, represento a los empresarios», insistió. Sí reiteró, sin embargo, que «la Constitución permite los indultos». «Respetamos la legalidad, la Constitución, el Estatuto. Hay un espacio enorme para dialogar. El presidente de la CEOE no va a hablar de política», señaló, huyendo del debate.

La presión del empresariado catalán en favor de los indultos va sin embargo en aumento. El miércoles, el presidente del Círculo de Economía, Javier Faus, ya los había defendido abiertamente ante el presidente catalán, Pere Aragonès. «Presidente, cualquier medida amparada por nuestro ordenamiento jurídico que fomente esta oportunidad, y los indultos lo son, tendrá el respaldo del Círculo», le dijo.

Casado: solo traerá frustración

Ayer, a esa presión se sumó el presidente de Fomento del Trabajo, la patronal catalana, Josep Sánchez Llibre, que avaló el perdón si ello ayuda a «normalizar» las relaciones entre la Generalitat y el Gobierno y consideró «muy relevante» que el líder de ERC, Oriol Junqueras, descartara en una carta la vía unilateral para la independencia de Cataluña.

En el mismo sentido, el vicepresidente del Círculo de Economía, Jordi Gual, expresidente de Caixabank, defendió en presencia del líder del PP, Pablo Casado, que los indultos no deben ser vistos como «concesiones inaceptables ni vergonzosas», sino como el inicio del diálogo. La alternativa a los indultos, defendió Gual, es la «cronificación del conflicto», que, a su juicio, es «muy negativa para Cataluña y para España». «No es una alternativa aceptable —continuó antes de dar la palabra a Casado—, a pesar de que pueda ser electoralmente rentable a corto plazo para algunos partidos políticos con posiciones más intransigentes».

El líder del PP, que había acudido a las jornadas del Círculo de Economía en Barcelona con la intención de expresar su apoyo al empresariado catalán ante las consecuencias del procés, se quedó así solo en su rechazo a los indultos. «Jamás haré nada contra Cataluña, quiero que no haya confrontación, pero no haciendo más cesiones que solo van a traer más frustraciones», sostuvo el líder popular.

Pedro Sánchez tratará de aprovechar esa presión favorable a los indultos en el empresariado catalán y este lunes ofrecerá en el Gran Teatro del Liceo de Barcelona una conferencia con el título de Reencuentro. Un proyecto de futuro para toda España en la que expondrá su apuesta por la concordia y el perdón a los presos.

El líder del PP respeta a la patronal y a los obispos catalanes, pero apela a la ley

El líder del PP, Pablo Casado, expresó su respeto a los empresarios que apoyan los indultos para los líderes del procés, pero reafirmó su oposición frontal a la medida de gracia e insistió en que toda búsqueda del «reencuentro» ha de ser en el marco de la ley.

Casado se acogió a las precisiones hechas por el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, a sus propias declaraciones. «Ya ha matizado sus palabras y ha dicho algo que comparto: que somos los políticos que nos hemos sometido a las urnas los que hemos de hablar de estas cuestiones», señaló. Rechazó también el pronunciamiento de los obispos de las diez diócesis de Cataluña, que ayer defendieron el diálogo y «las medidas de gracia» para resolver «todas las situaciones de conflicto». «Con todo mi respeto a la Conferencia Episcopal, la patronal y los sindicatos, en España, como en toda democracia, lo que decidamos se decide en el Parlamento nacional y lo que tengamos que decidir del conjunto de España tenemos que hacerlo todos los españoles», señaló.

El Gobierno vincula la salida de los presos a la estabilidad económica

El Gobierno acogió con optimismo los pronunciamientos de los empresarios catalanes y del presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, sobre los indultos. La ministra de Hacienda y portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, vinculó ese perdón a los presos con la estabilidad que reclaman los miembros de la patronal. Pese a las matizaciones introducidas posteriormente por Garamendi, la ministra dijo en rueda de prensa que se queda «con lo importante» de sus declaraciones. «Que este país necesita normalidad, tranquilidad, alejarse de la crispación política, para generar confianza en inversores», indicó. Los empresarios, según interpretó, «piden estabilidad y este Gobierno desde el minuto uno está trabajando por la estabilidad de este país y sin duda el encuentro con Cataluña permite estabilidad», recalcó.