acuerdos poselectorales
La posibilidad de que en Andalucía se repita lo ocurrido en Extremadura, en donde el PP gobierna gracias a que Izquierda Unida se negó a apoyar al PSOE, espanta en la dirección nacional de la coalición. Pero su coordinador general, Cayo Lara, sabe que dar por hecho ese pacto de antemano juega en su contra. Por eso trató de sembrar ayer la duda asegurando que IU «no es muleta de nadie». En rueda de prensa en Madrid, Lara afirmó que cualquier posible alianza después del 25-M se decidirá exclusivamente en base a propuestas programáticas, y sin excluir ninguna. Defendió la «soberanía» de las federaciones de IU para decidir sus pactos en cada autonomía. Y que, por tanto, serán los dirigentes de la coalición en Andalucía y también en Asturias los que «decidirán, en función del resultado, qué propuestas van a hacer al día siguiente».
El coordinador de IULV-CA y candidato a la presidencia de la Junta, Diego Valderas, advirtió también al socialista José Antonio Griñán de que no dé por hecho que le apoyarán, ya que para ello el PSOE tendrá que hacer «propósito de enmienda». A su juicio, hasta ahora lo único que han hecho los socialistas en Andalucía es «mucha política de derechas, que es la que nos ha traído después políticas todavía más duras del PP».