Dicterios y tutela

ESPAÑA

11 ene 2011 . Actualizado a las 02:00 h.

La manifestación del sábado en Bilbao, estratégicamente autorizada, ha sido otro empujón más a ETA para que saliera de su silencio y se pronunciara sobre lo que el resto del MLNV le estaba gritando. La violencia debe ser sustituida por la política. Tal hecho lo exigen los presos y sus familias, la izquierda aberzale, que desea presentarse a los próximos comicios; lo exigen los posibles aliados soberanistas EA y Aralar, y los mediadores internacionales. Pero ETA tiene varias cabezas y se resiste a dejar el ápice de la pirámide, desde donde controla al resto y establece las condiciones de la realidad y no se resigna a perder su papel de vanguardia en la construcción nacional de la nación vasca.

Los iluminados de ETA siguen convencidos de que la hoja de ruta pasa por la violencia, la lucha armada, el sufrimiento, las víctimas colaterales, las acciones que sitúan a toda la organización al servicio de la propia dinámica militar, en la que tarde o temprano, los Estados se tendrán que sentar a negociar con ETA. ¡Paranoia de la que se han ido escapando todos, menos los pistoleros!

Un comunicado de dos minutos y medio en un vídeo, en castellano, euskera y francés. Algo insólito en quienes siempre han hecho gala de retórica basada en análisis del pasado para recordar la gloriosa historia del ejército de liberación nacional de Euskal Herria. Esta vez, palabras concretas. Alto el fuego permanente, de carácter general y que puede ser verificable. La buena noticia es que no van a matar, que incluso podemos entender en lo de general que no van a realizar otras actividades como extorsionar o robar armas y explosivos, y que todo ello permanecerá y podrá ser comprobado por quien corresponda, suponemos que los mediadores internacionales. La mala noticia es que, ni se disuelven, ni dejan de intervenir, ya que vuelven a dar dicterios sobre el proceso o la hoja de ruta que se debe seguir, donde al menos no exigen estar presentes, pero tampoco queda del todo claro que le concedan a las instituciones democráticas vascas el papel de decidir el futuro de la sociedad, ya que su concepto de país, democracia e interlocutores siempre ha sido muy sui géneris.

Quizá de esto ya sabía algo Aralar de Navarra, que se negó a cerrar acuerdos con Batasuna. Brian Currin, el mediador sudafricano, intenta vender que lo positivo esta en que ETA ha respondido a la petición que se le hizo de forma unilateral. Grupos de la izquierda aberzale son muy expresivos cuando exhortan a las demás fuerzas políticas a que hagan esfuerzos para que se logre hacer «irreversible el proceso»; lo que quiere decir que ni ellos mismos tienen la convicción de que tras el comunicado haya más que una tregua.