García Escudero seguirá en el Senado y Ana Pastor pasa a vicepresidenta de la Mesa del Congreso

G.B.

ESPAÑA

01 abr 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Mientras en el Congreso Rajoy ha optado por la renovación, en el Senado ha apostado por la continuidad. El portavoz del PP en la Cámara alta seguirá siendo Pío García Escudero, lo que en principio, al igual que sucede con Sáenz de Santamaría, limita sus opciones de cara al congreso de junio, en el que todas las quinielas le situaban como secretario general. Rajoy está muy satisfecho con García Escudero, que ha coordinado la campaña electoral, y aprecia su carácter, que combina la dureza del discurso con la suavidad en las formas. Un espejo de que lo que el líder del PP planea para su partido.

Pero aunque Rajoy se ha propuesto seguir adelante exclusivamente con su equipo, es decir, sin concesiones a nadie, el deseo de renovación ha pasado factura a algunos de sus colaboradores. La gallega Ana Pastor, eterno brazo derecho de Rajoy, ha sido nombrada vicepresidenta de la Mesa del Congreso. Un cargo de alta representación y muy bien remunerado, pero que limita la influencia de Pastor en el partido y en el grupo parlamentario. Idéntico destino, vicepresidente de la Mesa del Congreso, le aguarda a otro gran colaborador de Rajoy, Jorge Fernández, que pierde así contacto con el líder. Los otros dos puestos en la Mesa del Congreso, de la que sale la también gallega María Jesús Sainz, son para Celia Villalobos e Ignacio Gil Lázaro. Además de García Escudero, en la Mesa del Senado estarán Juan José Lucas, Ramón Rabanera y Matías Conthe.

El futuro de Acebes

Rajoy no adelantó nada ayer respecto a quién podría sustituir en la secretaría general del PP a Ángel Acebes, al que agradeció públicamente su trabajo «en una situación que ha sido muy difícil». Lo mismo dijo sobre Zaplana, «que se ha batido el cobre en unas circunstancias difíciles tanto externas como internas». Poco antes de la intervención de Rajoy, Acebes había insistido en la necesidad de mantener unido al partido. El líder del PP recordó luego que cualquiera puede presentar una lista alternativa a la suya. «Ya se sabe que si hay una sola candidatura, será un congreso a la búlgara; y si hay dos o tres, será un partido que está dividido», añadió con ironía.