Nicolás Redondo deja la política pero sigue en su partido y en su tierra Nicolás Redondo Terreros confirmó ayer su abandono de la política por «profundas» discrepancias con la actual dirección del PSOE, pero aclaró a quienes le sitúan fuera del País Vasco y en otro proyecto político que no tiene pensado abandonar ni su partido ni su país. Además, aseguró que se siente más cerca de Jaime Mayor Oreja, que de Xabier Arzalluz.
10 abr 2002 . Actualizado a las 07:00 h.Entre ellas destacó las «profundas y radicales diferencias» con la nueva dirección del socialismo vasco, encabezado por Patxi López y elegida en el Congreso Extraordinario que él mismo provocó con su dimisión como secretario general. Unas diferencias «insalvables» tanto desde el punto de vista «estratégico» como en «la forma de sentir y vivir la política», que le han llevado, reconoció, «a dejar la primera línea de la actividad pública». Redondo desmintió a quienes le sitúan al frente de «una plataforma cívica liderando no sé qué y no sé cuántas» alternativas a su partido y dejó claro que «hoy y para siempre no haré nada en contra del PSOE, estaré con mi partido aunque mi partido se equivoque». También se esforzó en corregir a quienes le han sentenciado el final de su carrera política y «están empeñados en que me vaya al sur». Coherente con su trayectoria, se dirigió a todos aquellos ciudadanos que depositaron su confianza en el PSE y en su persona en las elecciones autonómicas del 13 de mayo y anunció que «no me iré a ninguna aventura política y tampoco me iré del País Vasco». «La suerte de Patxi López es la mía» El ex-dirigente socialista eludió en todo momento cualquier reproche a la nueva dirección de su partido y deseó al equipo encabezado por Patxi López «que lo haga bien, mejor que yo, porque su suerte es la mía y la de la sociedad vasca». Eso sí, rechazó las equidistancias entre populares y el nacionalismo que defienden los ganadores del último congreso socialista vasco y aseguró sin complejos que «yo tengo más que ver con Jaime Mayor Oreja que con Arzalluz». «Yo no juego a la equidistancia ni a estar entre unos y otros», exclamó Redondo, que se decantó nítidamente por el dirigente del PP Jaime Mayor porque aunque «es de derechas y yo de izquierdas, él es constitucionalista y yo soy constitucionalista; él es autonomista y yo soy autonomista». En cambio, explicó, Arzalluz «es profundamente de derechas y yo de izquierdas, él es independentista y yo no lo soy, él es nacionalista y yo no lo soy».