Keitano se está acostumbrando a las caminatas entre la gente por las calles y será protagonista en el desfile del Cocido
21 abr 2022 . Actualizado a las 18:42 h.Un ejemplar de carne y hueso promete quitarle protagonismo al cerdo más famoso de Lalín, la estatua de bronce asentada en la calle Colón junto al Kilómetro 0. Keitano, que así se llama, pasea estos días tan campante por el centro urbano ajeno a las miradas curiosas de los vecinos, a las fotografías y vídeos que le están convirtiendo en el puerco más viral de Galicia. Quizás hasta pueda tomar el relevo de Quinín, indultado en su momento y que moría con catorce años tras una mediática vida, feliz en su cochiquera de Carral.
La historia de Keitano -su dueño dice que el nombre le viene de la Gran Bretaña- comenzó a escribirse hace unos días con la celebración de la Matanza Tradicional do Porco en el Pazo de Anzuxao. Manuel Dovalo de la Torre acudía a la celebración y en conversación con el alcalde, José Crespo, le habló de ese marrano de seis meses, un macho capado de la raza Duroc, que era muy manso y poco asustadizo entre los humanos. ¿Por qué no podía participar en el desfile de la Feira do Cocido para representar a sus congéneres, a quienes ya pasaron por el cuchillo del matarife para deleite en la mesa? El reto quedó asumido.
Como paso previo al desfile del próximo domingo Manuel Dovalo decidió pasear a su bello ejemplar por las calles lalinenses para que se fuese ambientando. Con un arnés, para cuando toca redirigirlo, campa a sus anchas olisqueando todo lo pilla por el suelo. Los chicles son su debilidad y a las flores caídas de los camelias tampoco le hace ascos. Ajeno a que va camino de convertirse en una celebridad, al ritmo con que se comparten sus imágenes en redes sociales, posa como modelo sin inmutarse, obediente a las órdenes de su amo. Hasta dos conselleiros, los de Infraestruturas, Ethel Vázquez, y Cultura e Educación, Román Rodríguez, tras compartir mesa y mantel en Lalín, pudieron comprobar su elegancia paseando e incluso posar sonrientes con el cerdo.
Manuel Dovalo, ya jubilado y residente en Lalín, sigue criando cerdos para autoconsumo como hizo toda su vida. Keitano campa a sus anchas en una finca. De sus gustos sabemos que le encanta la tierra, la hierba y el maíz. En el desfile lucirá «vestimenta» con el lema «Son de Lalín» a los lados. Será una estampa nunca vista hasta ahora, un foco de atención que sumar a comparsas, charangas y carrozas.
Seguro que brillará con luz propia esta mascota convertida en estrella. Al menos convertirse en reclamo del Cocido le va a salvar de convertirse en chorizos, jamones y cachucha. Ochenta kilos en canal le calculan al animalito. Su dueño dice que «para o ano xa se verá» si continúa su indulto. Igual su porte y elegancia durante su recorrido del domingo le salvan para más tiempo. Muchos votarían por ello.