16 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.
La sala Tuno Valdés del Auditorio acogió en la tarde del sábado el Concerto do Cocido de la Banda de Lalín, titulado Sinfonías para reflexionar: a vida. La formación, bajo la batuta de David Fiúza, interpretó la Grande Symphonie funébre et triomphale, con Juan Romero Montoto, que acaba de recibir la distinción por sus 25 años en la banda, como trombón solista. El concierto contó con las corales de Lalín y Agolada como invitadas, dando un toque de color al final de la sinfonía de Berlioz.