Docentes y personal presentaron cinco denuncias al aparecer rayados varios coches tras entregar las notas La dirección del instituto Aller de Lalín comunicó a la delegación de Educación y al conselleiro, Celso Currás, la situación de violencia por parte de alumnos que vive tanto el profesorado como el personal no docente del centro. El último capítulo de las gamberradas de los escolares ocurrió en la jornada de entrega de las notas, el 20 de junio. Una vez que se entregaron las calificaciones a los alunmnos, siete coches de docentes y personal del IES aparecieron rayados. Se presentaron al menos cinco denuncias.
21 jul 2001 . Actualizado a las 07:00 h.Algunos de los coches que estaban aparcados dentro del recinto escolar del instituto Aller y que aparecieron rayados el día de la entrega de las notas tuvieron que ser pintados de nuevo en su totalidad. Así se lo comunicó en una circular el director del centro, Cristóbal Fernández, a los padres de los 900 escolares del IES. Los afectados presentaron al menos cinco denuncias en la Guardia Civil. Según explica la dirección a los padres, «alumnos do centro non identificados causaron raiadas a sete vehículos» el 20 de junio. El suceso se produjo una vez que los docentes entregaron las calificaciones a los alumnos «e cando os profesores íamos a reunirnos en claustro». El personal del Aller sospecha que esta gamberrada fue una represalia de alumnos molestos con sus notas. El mismo día en que se produjeron los hechos, el profesorado decidió introducir este asunto por vía de urgencia en el orden del día del claustro. Concertar un seguro En la reunión, se adoptó el acuerdo de remitir a la delegación de Educación y al conselleiro, Celso Currás, una misiva en la que le exponen la situación de violencia con la tienen que convivir tanto ellos como el personal no docente y exigen de la Xunta una solución que evite que se sigan produciendo hechos similares o incluso de mayor calado. «Esiximos solucións a esta problemática antes de que poidan ocorrer feitos de consecuencias aínda máis graves e pedimos da Administración que se abra un debate en torno a esta problemática». El profesorado insta a Educación a «concertar un seguro» que permita cubrir las consecuencias «deste tipo de atentados, alomenos cando se produzan dentro do recinto escolar».