Joshua Tarling se exhibe en A Coruña en el estreno de O Gran Camiño

Josema Loureiro / P. G. A CORUÑA / LA VOZ

DEPORTES

Marcos Miguez

El joven ciclista galés del Ineos se llevó con autoridad una accidentada etapa inaugural que no contará para la general

22 feb 2024 . Actualizado a las 21:09 h.

El ciclista galés Joshua Tarling (Ineos Grenadiers), de apenas 20 años, salió triunfante de la jornada inaugural de O Gran Camiño, una contrarreloj individual con llegada en la Torre de Hércules. Presidía este enclave la primera etapa de la tercera edición de la prueba gallega, celebrada en medio de una fría y ventosa tarde en A Coruña, y que no estuvo exenta de problemas debido a las condiciones meteorológicas.

Horas antes de que los ciclistas empezasen a pedalear, la organización no tenía la seguridad de que la prueba se pudiese disputar en condiciones normales por la incidencia de la borrasca Louis en la ciudad herculina. A las 14.25 horas, apenas veinte minutos antes de que el primero de los participantes estrenase el trazado del paseo marítimo de A Coruña, la organización confirmó que se celebraría, aunque con ciertas salvedades.

Por las intensas ráfagas de viento, que podrían poner en peligro la integridad de los ciclistas, la prueba se desarrolló con bicicletas convencionales y no de contrarreloj. Asimismo, y aunque sí se contabilizaron los tiempos reales a efectos de la etapa, ellos no se verán reflejados en la general, puesto que todos los participantes partirán desde este viernes con el mismo tiempo.

Dominio de los World Tour

Tarling, campeón de Europa de contrarreloj en el 2023, hizo gala del porqué del maillot que porta. Con un tiempo de 18 minutos y 21 segundos, pulverizó los registros de una parte alta de la tabla dominada en gran medida por los corredores de los seis equipos World Tour presentes en la cita gallega. El irlandés Darren Rafferty (EF Education-Easy Post) ocupó la segunda posición de la contrarreloj con un tiempo de 19.03, a 42 segundos del ganador de la etapa. El tercer escalón del podio lo ocupó un español, Pablo Castrillo (Kern Pharma), parando el cronómetro en 19.09.

Jonas Vingegaard (Visma-Lease a Bike), consciente de que un tiempo más modesto no pondría en riesgo su favoritismo, no forzó la máquina y finalizó en la 45.ª posición con un tiempo de 20.47.

Carlos Canal (Movistar Team), el primero de los gallegos, terminó la cita coruñesa en novena posición, parando el tiempo en 19.30.

«Poder ver a Jonas en A Coruña es increíble»

Marcos Miguez

Pese al frío, el viento y las circunstancias que convirtieron la etapa 1 en una mera exhibición, los aficionados no fallaron a su cita con O Gran Camiño. Aprovecharon, por encima de todo, el entorno privilegiado para apoyar a sus favoritos. Bien abrigados, ataviados con bufandas y guantes, además de chubasqueros para capear el incesante viento, pero presentes, al fin y al cabo.

Poco a poco, a la par que los primeros ciclistas llegaban al arco de meta, la subida a la Torre iba ganando color. Cada deportista se encontraría en su salida y en el tramo final de su ascenso hacia el final de etapa con el inconfundible sonido de los aplausos y de la sinfonía de percusión en las vallas metálicas laterales, señal inequívoca del apoyo de los seguidores coruñeses.

Este amparo se afianzó con la llegada de los ciclistas gallegos al trazado, como Carlos Canal, Andrés Taboada, Samuel Blanco y Delio Rodríguez. No se quedaban atrás los aficionados latinoamericanos, acompañados de sus respectivas banderas para insuflarle aire a sus compatriotas. Los ecuatorianos, locos con Richard Carapaz. Los colombianos, divididos entre Rigoberto Urán y Egan Bernal, pero igualmente pasionales en el apoyo a sus ídolos. El apoyo se extendió, entre otros, al puertorriqueño Abner González y al uruguayo Eric Fagúndez.

Sin embargo, las miradas estaban puestas en una figura en concreto. «¿Cuándo sale Jonas? ¿Le falta mucho para empezar?», murmuraba un niño en la primera fila, consciente de que iba a poder ver a un dos veces ganador del Tour de Francia a pocos metros. Vingegaard, que se reservó en carrera, fue la sensación entre las masas.

«Poder ver a Jonas aquí en A Coruña es algo increíble, una oportunidad que no tenemos todos los días», señala un seguidor del corredor. No faltaron algunos daneses, ataviados con su bandera para apoyar al vigente campeón de O Gran Camiño.

Pese a haber visto las marcas invalidadas por el viento, los seguidores del deporte no dejaron escapar la oportunidad de darle todo su calor a los ciclistas y, de paso, poder llevarse algún recuerdo. «Bottle, bottle», gritaban los niños en busca de las cantimploras de los participantes; alguno incluso llegó a conseguir el simbólico premio por parte de los corredores.

Otros, como Julen, dieron con la etapa a golpe de serendipia: «Vine de vacaciones a A Coruña sin saber que había etapa y decidí venir, es un oportunidad de ver a los grandes».

La etapa de este viernes recorrerá el Camiño de Inverno

La segunda etapa trasladará al pelotón a la provincia de Lugo. Con salida en Taboada y llegada a Chantada, será de 151,1 kilómetros y tres de desnivel. Transitará a lo largo de nueve ayuntamientos del Camiño de Inverno (entre ellos, Monterroso, Palas de Rei, Guntín y Portomarín) a través de la Ribeira Sacra. El recorrido lucense (15.30 horas, TVG-2 y Eurosport) tendrá la mirada puesta en el río Miño y en los paisajes del interior de la provincia.