Nadal alza su primer título del año en Melbourne

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DEPORTES

JAMES ROSS

Es el jugador con más temporadas exitosas consecutivas: diecinueve años con algún premio

09 ene 2022 . Actualizado a las 11:48 h.

Rafa Nadal ha conquistado el título del torneo de Melbourne (Australia), de categoría ATP 250 y preparatorio para el Abierto de Australia, después de superar este domingo en la final al estadounidense Maxime Cressy (7-6(6), 6-3), que ofreció batalla pero que no pudo evitar que el balear alzase su trofeo número 89 en el circuito ATP.

De esta manera, el número seis del mundo suma 19 temporadas consecutivas ganando al menos un título, todo después de cinco meses de ausencia para recuperarse de una lesión en el pie que le privó de participar en los Juegos Olímpicos y después de haber superado el coronavirus.

Sin embargo, el de Manacor tuvo que sudar en la Rod Laver Arena, donde a partir del 17 de enero se disputará el grand slam oceánico, para doblegar a un Cressy que sobrevivió a las cinco bolas de break del español durante el primer set y que forzó la disputa el tiebreak. En él, Nadal se mostró más solvente y consiguió adjudicarse el parcial. En la segunda manga, después de un intercambio de roturas antes del ecuador, el exnúmero uno del mundo ganó los tres últimos juegos para cerrar la final número 125 de su carrera en una hora y tres cuartos.

En su semana de regreso, Nadal ha sumado cuatro partidos (un dobles y tres individuales) y alrededor de siete horas de juego, un buen test para afrontar el Abierto de Australia, donde aspira a su primer título desde 2009 y a conquistar su 21º grande, que le convertiría en el jugador con más títulos de la historia en la categoría.

Con este título, el mallorquín es el cuarto jugador con más títulos individuales masculinos (89) de la Era Abierta, solamente por detrás de Ivan Lendl (94), Roger Federer (103) y Jimmy Connors (109).

Ganador de, al menos, un título por temporada desde hace 19 años

Rafael Nadal obtuvo en Melburne su primer triunfo del año, y prolonga su exitosa racha: ha ganado al menos un título por temporada desde el 2004. Son diecinueve años seguidos ya los que el tenista español ha cumplido en su cita con los trofeos. Desde que ganó el primero y estrenó su palmarés, en Sopot, en el 2004, Nadal ha conseguido al menos alzar una copa cada curso.

El mallorquín, que disputó su primera final en Australia desde que perdió ante Novak Djokovic en la final del Abierto del 2019, elevó a 89 la relación de méritos en su historial. Es el jugador con más temporadas exitosas consecutivas. Diecinueve temporadas seguidas con algún premio. Tres más que el número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic (2006-2021) y cuatro de ventaja respecto al suizo Roger Federer (2001-2015). Detrás del big three está el checo Ivan Lendl (1980-1993) y el estadounidense Jimmy Connors (1972-1984).

Fue el 2005 el año más fructífero en la carrera de Nadal. Cerró ese ejercicio con once títulos en su mochila. Entre ellos Roland Garros y cuatro Masters 1000 (Madrid, Canadá, Roma y Montecarlo). En el 2013 consiguió diez, su segunda mejor cosecha. Además de triunfar en el Abierto de Estados Unidos y en Roland Garros, logró el éxito en cinco Masters 1000 (Cincinnati, Canadá, Roma, Madrid e Indian Wells).

El español, de 35 años, se mantiene entre los mejores del mundo. Fijado en el sexto puesto del ránking ATP ya ha conseguido, en su primer intento y en su regreso oficial a las pistas desde su lesión, inaugurar el palmarés del curso con el triunfo en Melburne.

«Este año tengo un enfoque diferente, a pesar de que siempre las expectativas son muy altas por todo lo que he ganado», indicó tras ganar a Cressy en referencia a sus intenciones en el Abierto de Australia. «No me veo candidato real aunque en esto del deporte las cosas cambian muy rápido».

Nadal afronta el 2022 cargado de expectativas en su vigésimo primer año como profesional después de cerrar el 2021 con los títulos del Masters 1000 de Roma y el torneo de Barcelona, en una temporada marcada por las dificultades impuestas por el covid y por la lesión en el pie que le mantuvo al margen de la competición durante cuatro meses.