Más allá de los límites del deporte

Xosé R. Castro VIGO

DEPORTES

30 ago 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay atletas cuyas figuras trascienden los límites del deporte. Susana Rodríguez Gacio es una. Porque lo extraordinario no es solo que se haya convertido en campeona paralímpica de triatlón, sino cómo lo hizo. Después de atender una pandemia desde su posición de médico y de varios inconvenientes que surgieron por el camino y que pusieron en peligro que la viguesa pudiese cumplir su sueño paralímpico.

Susana es una historia de superación en grado superlativo. Lejos de venirse abajo el día que se quedó a las puertas de los Juegos Paralímpicos de Pekín en atletismo, la viguesa, con una deficiencia visual severa, lo que hizo fue cambiar de deporte (aunque volvió en el 1.500 metros y se convirtió en la primera en participar en dos modalidades en unos mismos Juegos). Cuando comenzó en el triatlón, lo hizo cosechando éxitos, pero en Río tuvo que conformarse con un diploma olímpico. Un detalle más para buscar la excelencia y colgarse el oro en Tokio.

Pero en estos cinco años se han agolpado las experiencias en la vida de Susana. Médico de profesión, vivió la pandemia de cerca, «Todas las mañanas veo gente muriendo», llegó a manifestar.

Pero no solo eso, en enero del pasado año le descubrieron problemas cardíacos y aquello le llevó a reflexionar. No podía seguir con semejante ritmo de vida y tenía que tomarse más en serio el descanso y la recuperación. Fue un severo toque de atención.

Portada de The Time, candidata al consejo de deportistas paralímpicos, su figura ha sido elogiada incluso por el presidente del Comité Paralímpico Internacional. Un icono en su modalidad que el mundo del deporte gallego no puede desaprovechar.

No todos los días surgen historias tan fascinantes y tan ejemplarizantes. Un guion propio de la pantalla grande, y más en este caso, con final feliz.