Tito Díaz: «La mejor etapa es la de jugador»

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A la contraFue base en los ochenta, entrenador cinco lustros y ahora encabeza la gestión del club en el que creció

29 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Como jugador subió con el Breogán desde Tercera hasta ACB y llegó a disputar la Korac. Como entrenador ha pasado por todas las categorías, desde la Segunda División masculina hasta la ACB y la Liga Femenina. Siempre sin salir de Galicia. Y ahora está en la dirección general del Breo. Tito Díaz conoce de primera mano todas las trincheras del baloncesto.

-Una tópica para empezar. ¿Qué etapa se disfruta más?

-Sin duda, la de jugador, la más divertida y la más bonita. Incluso más como amateur, porque disfrutas más de la esencia del baloncesto. Como entrenador se complica todo. También puedes incidir en el juego, aunque no de una manera tan directa. Como jugador acabas de entrenar, te vas a casa y descansas. Como entrenador estás las 24 horas del día. La etapa de director general la estoy descubriendo. Es muy interesante, pero quizás la más ingrata, porque se ve poco lo que se hace y siempre pesa más un error que nueve aciertos.

-Y una atópica, para que afloren las emociones. Lo de llegar a jugar competición europea en el equipo de la ciudad...

-Sí, fue tremendo, increíble. Pero, más que llegar, todo el camino, ascender de Tercera a lo más alto y estar seis años en la ACB.

-Por cierto, como jugador se retiró con un ascenso.

-Fue un segundo retiro, porque me repescó Tonecho para el Portas y volví para cuatro o cinco meses, tras un tiempo parado.

-¿Nunca se planteó jugar o entrenar fuera de Galicia?

-No. Tuve la ocasión, como jugador y como entrenador, pero prefería quedarme. Como jugador, porque el del Breogán era un proyecto muy bonito, mi club y mi ciudad. Y como entrenador antepuse la familia. Mi mujer es profesora en Vilagarcía y tenemos cuatro hijos, que ahora son mayores. Cuando son pequeños no es lo mismo. Y supongo que también habría morriña.

-Finamente le llegó la ocasión de entrenar al Breogán en la ACB. ¿Qué le faltó para coronar?

-Quizás algo de tiempo para hacer el equipo un poco más a mi idea. Llegué un martes y ese domingo ya teníamos un partido vital ante el Fuenlabrada. Competimos, pero nos faltó ese último tiro en tres o cuatro partidos para ganar. El Tenerife nos ganó con un triple en el último segundo, en Valencia tuvimos dos tiros de tres para ganar en la última jugada... Pero al final nos quedamos en la orilla.

-¿Qué jugador le ha marcado más en toda su trayectoria?

-Linton Townes. Llegó al Breo a la LEB con 37 años, tras jugar en el Madrid y ganar la liga con el Manresa. Es de los que siempre daba ejemplo. Al acabar la temporada me llamó Moncho López, que se lo quería llevar a Gijón. Le dije que sin ninguna duda. Y ascendieron.

-¿Qué le espera al Breogán tras los embates del covid-19?

-Una temporada difícil, como a todos. Tenemos una ventaja, una estructura muy sólida con un consejo de administración en el que están los principales accionistas y la patrocinadora, Carmen Lence. Trabajamos en un plan de viabilidad a dos años vista para intentar que el club se resienta lo menos posible. Pero nos espera un presupuesto más austero, acorde a la realidad que nos toca vivir.

-¿Ya lo tienen cuantificado?

-Todavía no está cerrado del todo. Nos tenemos que entrevistar con algún patrocinador. Tendremos que llegar a más sitios. Y estamos expectantes con nuestros abonados y el aforo. Somos más de 4.000 en LEB. El Breo es sentimiento y seguimiento, cada partido es una fiesta. Y estamos preocupados por si hay que reducir el aforo durante un tiempo.

-El proyecto deportivo está muy por hacer.

-Epi sigue al frente del equipo. Siempre queremos empezar por el entrenador, que es el que marca la pauta en la parcela deportiva. Ha demostrado compromiso. Ha aceptado una rebaja en el sueldo y sabe que iremos a una plantilla con menos dinero. Eso es lo que buscaremos también con los jugadores: compromiso, ilusión y hambre. El único con contrato es Sergi Quintela. La implicación está garantizada.

-¿Cuál sería su quinteto de la LEB Oro de este curso?

-La del Breo, con Soluade y Christian Díaz, era una gran pareja de bases. Justin Pitts lo hizo muy bien en Alicante. Como escolta, John Dee es el más anotador. En defensa me quedo con Quintela, capaz de emparejarse con un uno, un dos o un tres. Como alero alto destacaría a jugadores de intangibles como Kacinas, del Palencia y Niksha, del Valladolid. Powell me parece extraordinario para el cuatro. El cinco más determinante fue Kevin Larsen, pero no me olvidaría del trabajo de Bamba Fall en Alicante, excelente en ataque y defensa, y Aboubakar en Valladolid.

EN CORTO

Tito Díaz disfruta con el baloncesto, pero también con la lectura, con los paseos o con un buen vino.

-¿Arde Lucus o San Froilán?

—San Froilán, soy tradicional.

-¿Churrasco o sardinas?

-Sardinas en verano y churrasco todo el año.

-¿Vino o cerveza?

-Vino.

-¿Cuál me recomienda?

-Un blanco, albariño, y no excesivamente frío, hay que tomarlo fresco. En tinto me encanta los Ribera del Duero.

-¿Una afición?

-Me gusta pasear, porque me activa el pensamiento. Caminar y charlar. Y me gusta leer.

-¿Qué libro tiene entre manos?

-Acabo de terminar Los crímenes de Alicia. Me gusta mucho la novela negra y también las biografías.

-¿Un defecto?

-Tengo mucho carácter y a veces me dejo llevar por el corazón. Tendría que pensar más, pero también soy muy intuitivo.

-¿Una virtud?

-No soy rencoroso, si se le puede considerar virtud. Y soy muy optimista.

-¿Qué le hace perder el quicio?

-En el baloncesto, la falta de compromiso. Y en la vida normal, la maldad, ver que se hacen cosas con maldad. Me gusta muy poco la mala gente.

-¿Un chiste?

-Uno malísimo, el del cerdito. Va un señor paseando con un cerdito, se cruzan con una cerdita y le dice: Si eres bueno, mañana te traigo para que la conozcas. Oink, oink. Hoy no, mañana.