Un Valencia entre amigos

Xurxo Fernández Fernández
xurxo fernández REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

John Sibley | Reuters

Lim acepta la dimisión del protegido de Mendes para entregar el banquillo de Mestalla a sus socios, los hermanos Neville

03 dic 2015 . Actualizado a las 18:59 h.

La movida de Manchester tuvo su auge en los 80 con el nacimiento de varias bandas de culto como The Stone Roses, Happy Mondays o The Charlatans. Esta última sigue viva y ligada a un club, el United, del que varios de sus miembros son fans confesos. Este año, a principios de julio, el grupo ofreció un concierto para público reducido en un establecimiento ubicado frente a Old Trafford. En plena actuación, uno de los dueños del Sports Hotel subió al escenario y se atrevió con la guitarra frente a sus huéspedes. El cameo, que puede verse en youtube, no estuvo mal para un músico aficionado: «Solía tocar hace diez años, pero después me casé y tuve hijos». Gary Neville resucitó su técnica mediante un proceso de observación. El guitarrista de The Charlatans visitó al exjugador de los diablos rojos y tocó un tema mientras el otro le grababa con su móvil. A fuerza de ver la captura, el aprendiz de músico captó la colocación correcta de los dedos sobre las cuerdas.

A eso se encomienda ahora el Valencia. A un voyeur con pedigrí. Un esforzado lateral derecho que ganó varios títulos para Alex Ferguson antes de colgar las botas hace cinco temporadas y dedicarse a la observación. Como comentarista de la cadena Sky y como ayudante del seleccionador inglés, Roy Hodgson.

«Sería mejor para él si se dedicara a ser entrenador a tiempo completo», advirtió Hodgson en enero al hablar de su pupilo. El técnico recomendaba a Gary soltar el micro y ayer vio cumplido su deseo por gracia de Peter Lim. El empresario que controla el club de Mestalla ha elegido para el banquillo a un exfutbolista sin más experiencia en su nuevo oficio que la que se obtiene al fijarse (y superar los cursos preceptivos). El mayor de los Neville se reunirá así con su hermano Phil, que ya trabajaba en el club che desde este verano y con el que también compartió once años de carrera en el United (en el 2005, el menor cambió el lateral izquierdo de los de Manchester por el centro del campo del Everton).

Varios negocios en común

Al menos afrontará acompañado un reto de envergadura. Para su debut como míster le ha tocado la plaza más caliente de una liga con la que no ha tenido contacto en un país cuyo idioma no domina y al que llega con el cartel de protegido de su socio empresarial. Porque el hotel en el que guitarreó este verano es solo un poco suyo. Desde septiembre, el 75% del negocio le pertenece al millonario de Singapur que posee también el Valencia.

No es su única inversión compartida. Peter y Gary (y Phil y otros tres exjugadores de los diablos rojos: Ryan Giggs, Paul Scholes y Nicky Butt) son copropietarios de una cafetería (Cafe Football, en Londres), una empresa de gestión (CG Collections) y un modesto equipo (el Salford City) de la sexta división inglesa. Lim desembolsó 40 millones de euros para convertirse en socio mayoritario de los cinco miembros de la exitosa Clase del 92 del club de Old Trafford.

La afición del Valencia no parece haber encajado bien la designación del mayor de los Neville. Una encuesta del diario Las Provincias arrojaba un 77% de votos en contra del nuevo entrenador, que al menos se librará de la visita del Camp Nou, para la que Voro continuará dirigiendo al equipo che como técnico interino.

No parece la mejor carta de presentación para el novato que relevará en el banquillo a Nuno. Este, protegido de Lim. Aquel, de Mendes. El portugués dejó alguna frase memorable en su despedida: «En la presentación fue una sorpresa que Mestalla me silbase. Si miro hacia atrás, pudo haber sido un momento lógico de no seguir». Resistió y ahora llega Gary, el improvisado guitarrista de aquel tema de The Charlatans: Justo cuando pensabas que todo había terminado.