Djokovic honra a su mentora

P. A. L. / Agencias REDACCIÓN / DPA

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ANDY RAIN

El serbio dedica el título en Wimbledon a su mujer, su futuro hijo y su primera entrenadora

07 jul 2014 . Actualizado a las 17:34 h.

Fue una celebración muy repartida la de Novak Djokovic. Después de abrazarse con todo su equipo, donde lucía el pelo rubio de su asesor técnico Boris Becker -tres veces ganador en Wimbledon-, tomó el micro y le brindó su segundo título en Londres a varias personas. «Quiero dedicarle el triunfo a unas pocas personas. Primero a mi futura esposa, (Jelena Ristic, embarazada y ausente esta vez en Londres) y a nuestro futuro bebé. Voy a convertirme en padre pronto y estoy todavía preparándome para eso. Este triunfo es para la familia, mis amigos, mis hermanos y mi equipo, por supuesto, porque me permiten cumplir sueños y estar aquí», dijo antes de acordarse de Jelena Gencic. «Fue mi primera entrenadora, me lo enseñó todo y murió el año pasado» comentó ante la ovación del público.

Djokovic combinó la elegancia del campeón con los toques de humor que siempre acompañan sus comparecencias. «Primero quiero felicitar a Roger por su gran torneo. Fue una gran final. Él es un fenomenal campeón, con una brillante carrera, y un auténtico ejemplo como atleta. Gracias por dejarme ganar», indicó para carcajada del público.

Sobre el partido, aún sobre la pista central, y sin separarse ni un momento de la copa, añadió: «Esperaba que Federer fallara el primer saque, pero no lo hizo, por eso tiene 17 Grand Slams. Después de perder el cuarto set no era fácil recuperarse, pero no se cómo logré hacerlo. Este es el torneo que siempre soñé ganar, este es el torneo más valioso del mundo. El primer partido que vi cuando tenía cinco años fue en Wimbledon. Eso marcó algo en mi cabeza, pero nunca pensé que algún día llegaría a ganarlo», explicó emocionado el serbio.

Tal como marca la tradición en Wimbledon, Djokovic recibió el trofeo de manos del duque de Kent y presidente del All England Club, el príncipe Eduardo. Y respondió luego a unas preguntas sobre la pista, una fórmula que evita los discursos monótonos en los que se habían convertido las intervenciones de algunos tenistas en las finales de los grandes torneos. En el palco real del All England Club, aplaudían el exfutbolista inglés David Beckham, el entrenador Alex Ferguson, y antiguas leyendas del tenis como el australiano Rod Laver, ganador de cuatro títulos individuales en Londres, y los príncipes Guillermo y Catalina.