Carlos y Antón Paz comienzan a disputar desde hoy el Campeonato del Mundo de la clase 49er, prueba que se celebra en aguas de Marsella. La cita acoge a los mejores especialistas, a todos los que tienen entre ceja y ceja estar presentes en los Juegos Olímpicos que se disputarán en Río de Janeiro.
Los regatistas vilagarcianos acuden al Mundial con la moral alta tras los buenos resultados que cosecharon tanto en en el Trofeo Princesa Sofía, donde concluyeron en el sexto lugar, como en la Semana Olímpica de Hyeres, donde pudieron colgarse la medalla de bronce.
Un nubarrón, sin embargo, parece acechar a los arousanos. No se espera mucho viento -los partes vaticinan una intensidad de entre cuatro y diez nudos- y eso no ayudará nada a los hermanos Paz. «Se esperan muchos pozos de viento y roles que dificultarán la táctica, sobre todo en los primeros compases de la regata», explica Carlos.
Ayer se celebró una regata de entrenamiento en la que participaron todas las embarcaciones pero lo bueno comenzará en la jornada de hoy. Las embarcaciones se dividirán en tres grupos de 33 barcos, que se medirán durante las dos primeras jornadas del campeonato -que serán de clasificación- con seis pruebas previstas. Al tercer día, los cuarenta primeros pasarán al grupo oro, que se dividirán en dos grupos de veinte para realizar cuatro pruebas de veinte minutos. Los veinte primeros serán los que formarán el grupo de las finales.
Los vilagarcianos llevan un par de semanas entrenándose en aguas francesas con los técnicos del equipo nacional Santiago López-Vázquez y Carlos Llamas. «Estamos con confianza de poder realizar un buen resultado», afirma Antón. Australianos y neozelandeses son los grandes favoritos.