La escudería italiana y el piloto están obligados a colaborar para seguir con opciones
05 sep 2013 . Actualizado a las 20:37 h.Para Ferrari es la carrera más importante de la temporada, pero el domingo en Monza no están juego sólo emociones, pasión y una victoria. Si gana el alémán Sebastian Vettel el Gran Premio de Italia, Fernando Alonso podría decir adiós a su sueño de proclamarse campeón del mundo.
Y tanto si quieren como si no, Alonso y Ferrari dependen el uno del otro en la lucha por el título. En su desesperada caza del triple campeón mundial, ya muy distanciado, deben hacer gala de cohesión y armonía pese a las rencillas internas.
«Monza es para nosotros la carrera más importante del año. Vamos a disputarla con gran motivación», subrayó Alonso.
Antes de la pausa de verano (boreal), el español había criticado a menudo y con dureza a su tambaleante equipo. Inmediatamente después del fracaso de Hungría, el jefe de Ferrari, Luca di Montezemolo, estalló y llamó al orden públicamente al doble campeón mundial a través de la página de Internet de Ferrari.
Y surtió efecto. «Se trata de un malentendido», corrigió Alonso las noticias de que deseaba un nuevo auto para su cumpleaños.
Desde entonces reina la armonía, por lo menos de puertas para afuera. «Estén seguros de que estamos unidos para ganar», afirmó el jefe del equipo, Stefano Domenicali, antes de la duodécima carrera de la temporada. El italiano rechazó de plano que entre él y Alonso hubiera disensiones. «No, no, eso es algo que rechazo: queremos ganar juntos».
Alonso, por su parte, comentó en tono conciliador: «Ferrari siempre fue competitiva aquí. Queremos brindar una buena actuación a nuestros seguidores».
Será necesario para poder dar un giro al Mundial. Antes del Gran Premio de Italia, Alonso, segundo en la clasificación general, cuenta con 151 puntos, a 46 de distancia del líder Vettel (191).
Forzados a colaborar
Alonso y Ferrari están forzados a colaborar no sólo por la actual situacion desfavorable y no sólo esta temporada. Los italianos dependerán durante muchos años de Alonso, y la superestrella española no tiene otra alternativa a la «scuderia».
«Tengo aún tres años y medio de contrato y quiero cumplirlo», dijo hoy Alonso. «Me gustaría terminar mi carrera en el mejor equipo del mundo y éste es Ferrari», agregó.
De los pilotos punteros sólo el finlandés Kimi Raikkönen está en el mercado. Vettel (Red Bull) y el dúo de Mercedes Lewis Hamilton y Nico Rosberg están ligados a sus equipos por largo tiempo. Y parece dudoso que los italianos busquen de nuevo al finlandés, al que echaron en 2009 para hacer hueco al español.
El contrato de Alonso no expira hasta finales de 2016. Pero lo decisivo es que no hay vacante de piloto en ningún equipo puntero.
Lotus, si Raikkönen se marchase de verdad, no sería una alternativa tentadora ni deportiva ni económicamente.