Los ocho combates de boxeo y kick boxing disputados el viernes por la noche en Cerceda reunieron a unos 300 espectadores en el pabellón González Laxe, que vibró con una velada que fue de menos a más. Después de los tres primeros enfrentamientos, en los que los contendientes eran debutantes, la velada empezó a animarse con cuatro enfrentamientos de buen nivel en los que los boxeadores lo dieron todo sobre el ring.
El combate neoprofesional que cerraba la noche, entre Aarón González (Pontevedra) y Borja Nogueira (Sada), fue declarado nulo por los jueces, aunque para el presidente de la federación gallega, Manolo Planas -muy satisfecho con la velada y el apoyo del Concello-, debió ganarlo el sadense «porque los tres primeros asaltos que hizo».