Tan extraordinarios como normales

Fernando Hidalgo Urizar
Fernando Hidalgo EL DERBI

DEPORTES

03 jul 2012 . Actualizado a las 11:20 h.

La apoteosis vivida ayer en Madrid es digna de la gesta de la selección. Tras décadas entregados al fatalismo, España ha encontrado un grupo que aúna todas las virtudes con las que uno pueda soñar. La primera es que gana. Y sin eso, no hay nada. O casi nada.

La segunda, que convence. España tiene un estilo que es temido, envidiado y, en todo caso, siempre admirado. Marca tendencia y ha convertido su juego en un modelo. Italia ya no parece Italia; Alemania no tiene nada que ver con la apisonadora eficaz de toda la vida. Y Francia también se ha pasado a la fe de los bajitos. Todos quieren ser como España.

La tercera es que rebosa talento. Y esto no se puede imitar. Nadie puede enseñar a jugar como Iniesta porque ni el propio Iniesta sabe qué es lo que hará con el balón el próximo minuto.

Y cuarta, desde que desaparecieron los Raúles y demás, España es un grupo de buenos chicos, amigos y gente normal que solo quiere jugar al fútbol.